El Museo Goya de Zaragoza se ha convertido por derecho propio en un referente nacional en la obra y la figura del genio de Fuendetodos. Sin embargo, el centro de la Fundación Ibercaja no se conforma y también quiere acrecentar su fama de cara al exterior. Persiguiendo ese objetivo, acaba de incorporar a su colección permanente uno de los primeros retratos oficiales de Goya: el óleo sobre lienzo 'Miguel de Múzquiz, Conde de Gausa'. La obra, realizada en torno al año 1783, es propiedad de unos coleccionistas particulares que han decidido cederla en préstamo indefinido. A partir de ahora se exhibirá en la sala Goya, en la segunda planta del museo.
La nueva incorporación ha sido presentada este miércoles por José Luis Rodrigo, director general de Fundacion Ibercaja; Charo Añaños, directora del Museo Goya, y Domingo Buesa, presidente de la Real Academia de Nobles y Bellas Artes de San Luis y patrono de Fundación Ibercaja. «El museo ya es el segundo de España (tras el Prado) con más obra de Goya», ha destacado Buesa. De hecho, el centro de la calle Espoz y Mina ya cuenta en su colección con 25 obras del artista aragonés: 24 pinturas y un dibujo, además de las cinco grandes series de grabados que realizó entre 1778 y 1825.
En los últimos años, la Fundación Ibercaja ha apostado con fuerza por la política de cesión en depósito y lo cierto es que le ha dado muy buenos resultados. Esta fórmula de incorporar obras comenzó en 2016 con la llegada del retrato del nieto de Goya conocida como 'Marianito'. Posteriormente se han ido incorporando el retrato de Carlos IV, las obras ‘San Agustín’ y ‘San Ignacio de Loyola’ o las más recientes ‘Dios Padre y el Espíritu Santo en la Gloria’, ‘San Cristóbal’, ‘Virgen del Pilar con Santiago y uno de los convertidos zaragozanos’, así como un retrato inédito del Duque de Alba.
Cuando se presentó esta última incorporación el pasado junio, José Luis Rodrigo ya indicó que pronto llegaría otro ‘goya’, en referencia al presentado este miércoles. En esta ocasión, el director de Fundación Ibercaja no ha anunciado nuevas incorporaciones a corto plazo, pero ha dejado claro que siguen manteniendo negociaciones con coleccionistas privados.
La ampliación del museo, en esta década
Con el nuevo retrato incorporado este miércoles, a la sala Goya del museo apenas le queda más espacio, un hecho que aviva el proyecto de ampliación que maneja la Fundación Ibercaja. José Luis Rodrigo ha asegurado en este sentido que todavía no hay una fecha concreta para acometer las obras, pero ha confiado en que eso suceda «en esta década». «Nuestra voluntad sigue siendo ampliarlo, aunque de momento toda la obra está bien recogida», ha comentado. Esta ansiada ampliación se realizará incorporando un solar anexo ubicado en la calle Santiago, en la trasera del museo. Una pastilla de terreno que el Ayuntamiento de Zaragoza entregó a Ibercaja a cambio del suelo que la entidad financiera cedió al consistorio para poder ampliar Mercazaragoza.
La nueva obra incorporada se encuentra en perfecto estado de conservación y tiene unas medidas de 117 por 85 centímetros. El personaje retratado es don Miguel de Múzquiz y Goyeneche (1719-1785), primer conde de Gausa, y es uno de los primeros retratos oficiales que Francisco de Goya realizó en la corte, en torno al año 1783. El óleo ha formado parte de todos los catálogos razonados de Goya, donde se le asocia con otra versión de cuerpo entero de 200 por 114 centímetros que forma parte de la colección del Banco de España. Sin embargo, existen notables diferencias entre ellas, como la iluminación, la vestimenta, el sable o el escenario.
Goya también retrató a Miguel de Múzquiz en un dibujo que luego Fernando Selma convirtió en grabado (la técnica con la Goya logró una gran difusión y fama en su época). «El conde de Gausa fue ministro de Hacienda con Carlos III y una figura clave del Banco de San Carlos, actual Banco de España, y conocía personalmente a Goya, ya que era él quien le pagaba los cartones que realizó para la Real Fábrica de Tapices», ha explicado Buesa.
El retrato pudo ser encargado por el propio conde para pasar a la posteridad y «triunfar sobre la muerte», como ha indicado Buesa. Se piensa que el banquero posó para Goya, que lo pintó con la cruz de Carlos III y un sombrero bajo el brazo, «símbolo de prestigio y autoridad». «En esta obra Goya plasmó el alma del retratado, que aparece con un gesto cansado por el peso de la edad», ha indicado Buesa.
La obra esconde una sorpresa: en uno de los botones de la casaca, Goya incluyó las cuatro letras de su nombre, algo que hizo en más ocasiones. En el retrato de la Duqesa de Alba, por ejemplo, hizo lo mismo en su anillo.
Más visitas que en 2019
El Museo Goya de la Fundación Ibercaja ya ha logrado recuperar sus cifras de visitantes en este 2022. Tras dos años muy duros por culpa de la pandemia, el centro incluso ya ha superado en lo que va de ejercicio las cifras del año 2019. Según ha indicado la directora del museo Charo Añaños, desde enero el centro ya ha recibido la visita de más de 85.000 personas, frente a las 82.000 que contabilizó en 2019. Solo la exposición de Fernando Botero, inaugurada el 5 de octubre, ha logrado atraer por el momento a unos 25.000 visitantes (se puede disfrutar hasta el 12 de febrero).
