El Utebo por fin pudo estrenar ayer su nuevo terreno de juego, de césped artificial, aunque no lo hizo con buen pie, pues tan sólo pudo lograr un empate ante el Villanueva, un gran rival, en un partido interesante. David Navarro no pudo sentarse en el banquillo, pero lo vio casi como si estuviera sentado en él.

"El partido ha sido abierto y con ocasiones para los dos equipos, nosotros hemos tenido nuestras ocasiones", comentó David a la conclusión del partido. "La competición este año está tremendamente igualada, y de momento nos falta contundencia, presencia en el área y ser un poco más prácticos". El entrenador del Utebo no podía estar muy contento con el resultado, pero emanaba felicidad por la nueva instalación: "Casi te obliga a jugar bien, en un terreno tan bueno haces lo posible por agradar a la afición, que ahora aún podrá presumir más del campo", apuntó. "Lo mejor para el fútbol es jugar sobre césped natural, pero mantenerlo es muy complicado, y esto es lo que más se asemeja", explicó Navarro.

Mejoras

El técnico no se olvida de la cantera en ningún momento: "Los más beneficiados serán los chavales de las categorías base, que ahora pasan de jugar en un campo de tierra a uno en el que da realmente gusto". El Ayuntamiento ha sido el que ha financiado una instalación que se ha ejecutado en menos de dos meses, y sobre la que "los jugadores están muy contentos, caminando en una superficie buena en la que el balón no hace extraños", comenta Navarro. El campo no está a plena rendimiento: "Hay pequeñas averías que subsanar, como un aspersor que no funciona bien", recuerda, "y aún hay que esperar que el caucho se asiente, porque el en segundo tiempo ha hecho que el juego fuera un poco lento", pero esto no quita ni ápice de ilusión, y casi todo son elogios: "sólo faltan detalles sin importancia, cosas que se irán apañando, hemos ganado mucho", dice con orgullo, "todo está muy limpio, sin resto de obra y sólo vemos la cantidad de ventajas que nos va a dar". Todo son ventajas y es un gran adelanto para todos en general y para el Utebo en particular, con una sola pega : "Para adaptarlo a la normativa de la FIFA en cuestión de seguridad, nos hemos visto obligado a reducir las dimensiones del campo, que ya no eran muy holgadas", terminó de explicar David, deseando que "más clubs sigan el ejemplo".