Al Madrid no le queda casi nada que llevarse a la boca esta temporada. Mala cosa para Florentino Pérez, que había rezado todo lo que sabe y más para no verse en esta situacuón tan calamitosa. Expulsado de Europa, al equipo blanco no le queda otra que volcarse a la desesperada en la Liga, siempre a expensas de lo que el Barcelona le permita recuperar.
Ronaldo, a quien todo el madridismo se había encomendado después de abroncarle de forma inmisericorde hace apenas diez días, estuvo cerca de encarrilar al Madrid hacia otro título europeo con el pase a cuartos de final, pero acabó más derrotado que nadie. El delantero brasileño dejó solos a sus compañeros cuando más le necesitaban. Fue expulsado por patear a Tacchinardi en el último tramo de la prórroga, lo que vino a ser como abrir la puerta que da a la calle al conjunto madridista.
A Pérez le valió al final de la jornada lo que había dicho al principio referido al Bar§a. "Creo que merecieron pasar y lo hubiera desaado también", declaró el dirigente blanco, a quien no le vendría mal en momentos tan delicados contar con Jorge Valdano para dar la cara. El exdirector general estará hoy presentando el libro póstumo de Manuel Vázquez Montalban, Fútbol, una religión en busca de Dios .
Con resignación
Ni la Providencia ni Ronaldo escucharon los ruegos del presidente del Madrid, que, ahora sí, está obligado a llevar a cabo una renovación salvaje de su nómina de galácticos . Tampoco Vanderlei Luxemburgo salió bien parado del trascendental envite frente a la Juventus. Pérez acababa de confirmar que el técnico brasileño cumplirá su contrato y estará al frente de la plantilla madridista la próxima campaña pase lo que pase. A estas horas nadie puede estar seguro de que tenga la intención de cumplir su palabra.
El entrenador del Madrid intentó tomárselo con tranquilidad. "El partido ha estado muy equilibrado y al final han decidido los detalles", comentó Luxemburgo. Raúl no podía ocultar su disgusto. "No hay palabras para justificar la desilusión que tenemos todos", se lamentó el capitán blanco. "Sólo nos queda la Liga y pelearemos por ella con todas nuestras fuerzas", aseguró Raúl en Delle Alpi.
