Sergi Escobar ha empezado a seguir los pasos de Joan Llaneras como coleccionista de medallas de ciclismo en pista en los campeonatos del Mundo y Juegos Olímpicos. Ayer, en el Mundial de Los Angeles, no pudo reeditar el título conseguido el año pasado en Australia. Por esta razón, al corredor catalán le supo a poco la plata conquistada en la final de persecución, donde cayó derrotado ante el alemán Robert Bartko.

"La medalla no ha acabado de dejarme un buen sabor. Creo que me ha perjudicado el ambiente tan cargado que había en el velódromo, ya que me costaba respirar", declaró Escobar tras colgarse la medalla de plata, la quinta de su carrera, entre Mundiales y Juegos.

A partir de ahora, se dedicará por entero a la carretera. Escobar era el año pasado el jefe de filas del Bar§a. Las dos medallas conseguidas en Atenas no pasaron inadvertidas para José Miguel Echávarri y Eusebio Unzué, quienes le dieron la oportunidad de poder debutar como profesional, con 30 años. Escobar firmó por una temporada con el Illes Balears. "Por ahora --explicó ayer Unzué--, estamos encantados con él. Ha rendido por encima de las perspectivas creadas, antes de concentrarse con la selección española de pista".

MIRANDO AL GIRO En mayo podrá cumplir otra ilusión. Escobar está incluido en el equipo que el Illes Balears presentará en el Giro. Unzué tiene confianza en que el catalán, natural de Lleida, pueda ser uno de los referentes en el prólogo de la ronda italiana, que se disputa en Reggio Calabria, en un circuito cronometrado de apenas 1 kilómetro y 150 metros. "Peleará por la primera maglia rosa, aunque por sus características le iría mucho mejor que la etapa tuviera un kilómetro más, pues la distancia es ideal para los velocistas", añadió Unzué.