Barcelona, Real Madrid, Osasuna y Athletic tienen intención de pedir en la próxima reunión de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) la supresión del aval bancario para cubrir el 15% del presupuesto de gastos al que están obligados los clubs de la Liga al no estar constituidos como Sociedades Anónimas Deportiva (SAD).

La estrategia que persiguen estos cuatro equipos es recuperar una vieja reivindicación que no ha contado con el respaldo del grueso de los miembros de la LFP, porque se ha contemplado como una discriminación que estos equipos deportivos no estén obligados a la conversión en sociedades anónimas deportivas.

Según parece el objetivo de los cuatro equipos cuenta con la "comprensión" del Consejo Superior de Deportes, y de su secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky, quien se habría mostrado permeable a cambiar la ley. Los equipos afectados dicen que sufren una doble discriminación al tener que responder con su patrimonio en el caso de mala gestión, además de tener que avalar el 15% del presupuesto de gastos, que en el caso del Barcelona, por ejemplo, supone un desembolso cuatrimestral de unos 3.000 euros por directivo.