Aldo de Nigris, uno de los delanteros que tenía el Zaragoza en su agenda, aseguró en México que no se iba a mover de Monterrey y que se olvidaba de su deseo de jugar en Europa. Con todo el interés zaragocista era mucho menor que el del Fulham, que pidió oficialmente su cesión al Monterrey: "Era un sueño, era un buen equipo y era una buena posibilidad", señaló De Nigris.