Samuel Sánchez, Samu para todo el mundo, no es solo un apasionado del ciclismo. Lo es también de las motos y los coches. La bicicleta le ha hecho entablar amistad con Fernando Alonso, con quien ha compartido más de un entrenamiento por las tierras asturianas que los vio nacer a ambos. En este Tour se ha propuesto dar la sorpresa. Cuando se le habla de algo tan importante como la victoria responde con un ñquita, quita" y se echa a reír. Porque él sigue repitiendo que solo hay un corredor capaz de destrozar la ronda francesa en los Alpes. Es fácil adivinar: Contador.

--Usted ha sido el único corredor que ha atacado de verdad en los Pirineos. Este año, a diferencia de otros, se le está viendo más fino en las etapas de montaña. ¿A qué se debe el cambio?

--Al sacrificio. El oficio de corredor es sufrido y preparar el Tour para llegar en condiciones requiere vivir los dos meses anteriores pendiente solo de esta prueba. Y no solo en los entrenamientos, sino también en la alimentación y el descanso.

--O sea que para preparar el Tour está terminantemente prohibido salir de noche varios meses antes.

--¿Salir de noche? ¿Eso qué es? Suerte tengo de que mi mujer se ha dedicado al atletismo de una manera profesional y sabe lo que implica entrenar y vivir como un deportista. Salir de noche es algo prohibido. En todo caso, de vez en cuando y con nuestros dos hijos, salimos a cenar a un restaurante. Pero a las 11 y media de la noche ya estoy en la cama.

--¿Qué ha hecho este año para llegar en mejores condiciones?

--Sobre todo concentrarme en altitud. Me he pasado prácticamente dos meses yendo y viniendo de Sierra Nevada. Además he conseguido llegar al Tour mucho más delgado, más fino como decimos nosotros. Ahora peso un kilo y medio menos que en el 2010. Estoy en 65 kilos, lo que no está nada mal para mis 1,81 metros de estatura.

--Hablaba de sacrificio... ¿Tanto merece el Tour?

--Por supuesto. Ya de pequeño soñaba con hacer las gestas de Perico en el Tour. Luego me emocioné con Induráin. ¿Qué niño al que no le guste el ciclismo no ha soñado con triunfar en el Tour? Este año tuve una primera fase de competición que terminó después de la Lieja-Bastogne-Lieja. Luego, en abril, fui con la familia a pasar unos días a Andorra. Allí coincidí con Purito Rodríguez, que estaba a punto de irse al Giro. Pero había que empezar a preparar el Tour sin prisas por lo que no se me ocurrió salir con él por los montes andorranos. Y a partir de entonces, entre Asturias, Sierra Nevada y algo de competición a pensar las 24 horas en el Tour. Como debe ser.

--Y ahora a afrontar los Alpes con París cada vez más cerca.

--En esta carrera yo no miro el futuro lejano sino el día a día.

--Aparte de pelear por la general se encuentra en condiciones de disputar también la montaña.

--No voy a colarme en una fuga por puntuar en la montaña. Sería una locura. Estoy a dos puntos de Vanendert. Este año la organización ha decidido primar con más puntos los finales en alto. En los Alpes trataré de llegar entre los mejores ya que sería algo muy importante para mí y para mi equipo conseguir esta clasificación en París.

--Usted no quiere incluirse entre los favoritos que aspiran a ganar el Tour. ¿Por quién apuesta?

--El Tour se está corriendo pendiente de Contador, que es el monstruo de la época. Alberto es un excelente amigo y es normal que exista cierto pánico a lo que haga en los Alpes. Es normal que muchos lo miren de reojo en todas las subidas.