El magnate de la Fórmula Uno, el británico Bernie Ecclestone, aseguró ayer que "hasta hace dos semanas" no tenía claro que se volviera a correr el GP de España en el Circuito de Cataluña. "Creía que la prueba de Barcelona no se iba a volver a celebrar nunca más. Tampoco el año que viene", señaló en Nürburgring, escenario donde los políticos locales están debatiendo la conveniencia de mantener las ayudas oficinales para la F-1 o retirarlas. Ecclestone desveló que se ha sugerido que en España solo exista un Gran Premio de F-1, como sucede en Alemania, donde dos trazados se alternan la carrera.