El consejero de Industria, Comercio y Turismo del Gobierno de Aragón, Arturo Aliaga, mostró ayer su preocupación por el conflicto surgido entre la plantilla de Moulinex y el grupo francés SEB, propietario de la factoría de Barbastro, a cuyos responsables instó a cumplir el plan industrial de viabilidad acordado. El titular de Industria aseguró que desde el Ejecutivo autónomo se transmitió al grupo empresarial francés la inquietud existente en torno al futuro de la planta de producción de electrodomésticos y se comunicó que "los planes industriales son para cumplirlos".

Añadió que su departamento ha iniciado, sin embargo, labores de búsqueda de "alternativas industriales" y de captación de propuestas industriales con las que paliar el posible impacto sociolaboral derivado de la actual situación de Moulinex.

PACTO DE EMPRESA La falta de acuerdo entre la plantilla de Moulinex y la dirección de SEB en torno al pacto de empresa de la factoría barbastrense para 2004 motivó la decisión de los representantes sindicales de los trabajadores de plantear un conflicto ante el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (SAMA), pendiente de resolución.

Los sindicatos reclaman la equiparación salarial con los trabajadores de la factoría del grupo en Urnieta (País Vasco). La pasada semana, la dirección presentó ante el comité una propuesta en la que ofrece una subida salarial de 721 euros para el 2003 y el IPC previsto más un punto, sin cláusula de revisión, para 2004 y 2005. El comité acepta la subida de este año pero considera que sería más justo para los trabajadores que menos cobran una subida también lineal para los dos ejercicios siguientes. El próximo lunes se volverán a reunir ambas partes con el director general de Trabajo del Gobierno de Aragón, en lo que, para el comité, es un ultimátum.

FALTA DE CUMPLIMIENTO Desde el comité de empresa existe preocupación, además, por la falta de cumplimiento de un plan industrial de viabilidad para la planta de Barbastro, acordado entre las partes el pasado mes de febrero, que supuso la extinción negociada de 135 puestos de trabajo.

La representación sindical de la plantilla barbastrense aseguró recientemente que SEB sólo había puesto en marcha una de las tres nuevas líneas de producción previstas, dedicada a la fabricación de barbacoas, y que no existían garantías de continuidad para este producto.

Los sindicatos destacaron, además, que la dirección del grupo comunicó al comité de empresa la falta de trabajo para setenta de los miembros de la actual plantilla.

DECISION DE LA UE El comité de empresa de la planta de Barbastro valoró ayer positivamente, sin embargo, una resolución de la Comisión Europea que considera que la adquisición de Moulinex por SEB no genera una situación de monopolio en el mercado a favor del grupo.

Según los sindicatos, la decisión, que desestima una denuncia presentada hace un año por el fabricante francés Babyliss contra la operación de compra, favorece la eliminación de un "problema" que podría haber supuesto repercusiones negativas para la empresa.