La Denominación de Origen Aceite del Bajo Aragón prevé para esta campaña una producción de 1,2 millones de litros que serán comercializados con dicho sello, lo que supone un aumento de cerca de un 30% respecto a la anterior temporada. Así lo señaló ayer el presidente del consejo regulador, Alfredo Caldú, en el transcurso de una recogida simbólica de la primera cosecha del olivo empeltre plantado en el jardín de La Aljafería, en la que estuvo acompañado del presidente de las Cortes de Aragón, Francisco Pina.
Caldú destacó que la calidad de esta cosecha "está siendo muy propicia", a pesar de la sequía primaveral. En este sentido, manifestó que las buenas condiciones climáticas habían eliminado las "posibles enfermedades clásicas", mientras que las lluvias del otoño habían favorecido una excelente condición del fruto recolectado. Durante el acto, el presidente del consejo regulador --organismo creado hace ahora tres años-- apuntó la importancia de este sector del que viven cerca de 8.000 familias en las comarcas del Bajo Aragón turolense y zaragozano, así como del Campo de Belchite. En estos momentos hay 34 empresas inscritas en el Consejo Regulador de la Denominación de Origen.
Sobre la actual situación del sector en la comunidad, Caldú se mostró partidario de que la nueva OCM del aceite sea más proclive al pago de ayudas a la calidad frente a la producción. Por ello, reclamó más apoyo para las "zonas marginales" de producción, refiriéndose a la aragonesa, frente a aquellos territorios, como Andalucía, en donde prima la cantidad.
