La Unión de Agricultores y Ganaderos de Aragón (UAGA-COAG) pedirá responsabilidades a las Administraciones central y autonómica, así como a las empresas comercializadoras, por la contaminación por transgénicos de cultivos ecológicos o convencionales, lo que supone importantes pérdidas económicas para los productores. El secretario general de la organización agraria, Javier Sánchez, manifestó ayer, en Zaragoza, que la contaminación por cultivos modificados genéticamente representa "un atentado para un modelo de agricultura que apuesta por el desarrollo sostenible".

El agricultor aragonés Mariano Jiménez, que cultiva maíz ecológico, denunció la contaminación por transgénicos de 43.000 kilos de cereal, lo que le supuso unas pérdidas económicas de 4.000 euros, ya que el precio del transgénico es inferior al del ecológico. Ante los numerosos casos de contaminación, diversos colectivos, entidades y movimientos sociales se han organizado en la Coordinadora Anti-Transgénicos de Aragón (CATA).

Joaquín Arqué, de Ecologistas en Acción (una de las entidades que forman la coordinadora) rechazó los transgénicos porque "afectan al medio ambiente, la salud y el desarrollo sostenible del medio rural", mientras las Administraciones utilizan "la técnica del avestruz" de ocultarse bajo el ala. La coordinadora ha convocado hoy una concentración en contra de los transgénicos, en la plaza de España, para denunciar que las Administraciones, movidas por los intereses de las multinacionales, han autorizado el cultivo de transgénicos sin elaborar normas que regulen su coexistencia con cultivos ecológicos y convencionales.

Por su parte, el presidente del Comité de Agricultura Ecológica, Antonio Ruiz, criticó el borrador de Real Decreto de Coexistencia, elaborado por el Ministerio de Agricultura, que garantiza que los responsables de las contaminaciones genéticas sigan inmunes, pone en riesgo el futuro de una agricultura sostenible y puede provocar una presencia irreversible de transgénicos en la agricultura.