El vicepresidente y consejero delegado de Inditex, Pablo Isla, asumió ayer la presidencia del grupo textil gallego, líder mundial del sector, en plena expansión de la compañía y reafirmó su apuesta por la inversión "para seguir creciendo". Isla presidió la junta general de accionistas de Inditex, que fue informada de su nombramiento como presidente en sustitución de Amancio Ortega, fundador de la compañía y accionista mayoritario con el 59,23% de los títulos del grupo.

La junta aprobó una remuneración para Isla de 221.264 acciones del grupo textil, cuyo valor asciende a 13,4 millones de euros, como un "incentivo con carácter singular" por su nombramiento. Los títulos, que proceden de la autocartera que Inditex mantiene desde la oferta pública de venta (OPV) de julio del 2000, se le entregarán en un plazo máximo de tres meses a contar desde su nombramiento.

Asimismo, se aprobaron las cuentas anuales del ejercicio 2010 y la distribución de un dividendo de 997 millones de euros. De esta cantidad ya se ha abonado a los accionistas 0,80 euros por acción y a partir del próximo 2 de noviembre se pagará el dividendo complementario por el mismo importe.

En su presentación del resultado del ejercicio 2010, Isla destacó la "sólida" evolución del grupo durante el pasado año con un incremento de las ventas del 13%, hasta los 12.527 millones de euros, lo que supuso un beneficio neto de 1.732 millones, un 32% más que en el 2009. Además, añadió que la empresa continuó su expansión internacional, con la apertura de 437 nuevas tiendas.