Las descalificaciones que Juan Rosell, presidente de la CEOE, dirigió el pasado lunes a funcionarios, parados y usuarios de la sanidad pública merecieron ayer una reprobación general, excepto de los partidos del centroderecha. Algunos como la portavoz del Gobierno vasco y el sindicato CCOO denunciaron que tras las palabras del jefe de la patronal se esconden intereses para hacer negocio ante hipotéticas privatizaciones.

Aunque la censura a los trabajadores públicos y el adelgazamiento de las administracion forman parte del ADN del discurso de Rosell, el empleo de calificativos como "prepotentes" así como tachar a los usuarios de la sanidad pública de abusones, hicieron saltar las luces de alarma, aunque algunos consideraron que la palabras del jefe de la patronal se contestaban por sí solas.

ACEPTACIÓN SOCIAL El ministro de Trabajo, Valeriano Gómez recordó que también son trabajadores públicos los médicos, policías y enseñantes que, según los sondeos, cuentan con una gran aceptación social. Gómez señaló que el absentismo en las administraciones en España es similar a la de otros países europeos y a la de las empresas privadas.

En cuanto a los que se apuntan al paro "porque sí", como dijo Rosell, el titular de Trabajo informó que de los 235.000 perceptores del desempleo investigados en el último año, a una cuarta parte (unos 58.000) se les retiró por cobrarlo fraudulentamente.

En una carta a Rosell, el responsable de función pública de CCOO, Enrique Fossoul, le pide una rectificación ante unos ataques "injustos y mezquinos" hacia unos trabajadores sobre los que ha recaído parte del ajuste. En este sentido, recuerda que durante años los trabajadores públicos tuvieron unas subidas salariales en torno al 2% cuando los precios estaban en torno al 4%; que en el 2010 les recortaron sus retribuciones un 5% y que en el 2011 ha habido una congelación de la masa salarial. El sindicalista coincidió con la portavoz del Gobierno vasco, Idoia Mendia, en que tras que las críticas hay intereses privatizadores.

"Jamás hemos encontrado receptividad para la modernización de los público" por parte de la CEOE, dice Fossoul, que añade que la patronal está "más interesada en lo que pueden ofrecer de negocio una parte de las necesidades que cubren los servicios públicos".