El plan de rescate de Grecia puede contener el contagio de la crisis en opinión del premio Nobel de Economía Joseph Stiglitz. El diario ateniense Ta Néa recogió ayer sus impresiones en las que subraya que las decisiones de los dirigentes europeos son una respuesta que "parece ser convincente" y permite "contener el contagio a otros países". El Nobel se muestra convencido de que el acuerdo puede considerarse una solución política y, por lo tanto, "un paso hacia la integración de la zona euro y de Europa".

Después de un primer programa de ayudas para Grecia en el 2010, la zona euro decidió el jueves un nuevo plan de rescate que implica la movilización de más de 160 millones, además de una reestructuración parcial de la deuda griega y la participación de la banca en esa reestructuración, como pretendía Alemania. Al menos 30 bancos europeos, entre ellos el BBVA, se han mostrado de acuerdo en participar en la reestructuración parcial de la deuda. Esos bancos suman 80.000 millones en bonos helenos.

Según Stiglitz, el acuerdo es realmente importante, aunque aún resta analizar los detalles. No obstante, el reforzamiento del Fondo Europeo de Estabilidad financiera (FEEF), la renegociación de los bonos en el mercado secundario, la reducción de intereses, la sustitución de obligaciones griegas por otras con condiciones más favorables, así como las garantía ofrecida por el BCE "constituyen un plan importante que hace frente al problema".

RESPALDO CHINO El Banco Popular de China se mostró ayer optimista ante la decisión europea de aprobar un segundo paquete de rescate a Grecia, señalando que la medida "ayudará a resolver los problemas de la deuda soberana en la zona euro". "Apoyamos los esfuerzos de la UE y la Eurozona para combatir la crisis financiera global y mejorar sus regulaciones fiscales", destacó el gobernador del banco, Zhou Xiaochuan.