La crisis y la baja demanda en el comercio del mueble se están prolongando más de lo esperado, lo que está obligando a las empresas del sector a tomar medidas más drásticas para afrontar las dificultades. En este contexto, la firma aragonesa Muebles Grabal ha presentado recientemente un expediente de regulación de empleo (ERE) para recortar su plantilla en 59 trabajadores. La medida se enmarca en un plan de reestructuración puesto en marcha por la empresa para "optimizar" procesos, reducir costes y adaptarse a su actual carga de trabajo, según informaron fuentes de la compañía.

Este fabricante mayorista de muebles, cuya planta se encuentra ubicada en Cuarte de Huerva, ha aplicado ya dos ERE temporales en los últimos años, pero la situación actual del mercado "nos ha obligado a realizar mayores esfuerzos para hacer posible la continuidad de la fábrica", apuntó ayer Iker Plou, gerente de Muebles Grabal. "Toda la competencia se ha reestructurado ya, mientras que nosotros hemos aguantado hasta ahora sin hacer ningún ERE de extinción", justificó.

El expediente, que reducirá la plantilla a unos 90 empleados, ha sido ya pactado con el comité y se encuentra pendiente de su autorización por parte de la Dirección General de Trabajo del Gobierno de Aragón, según apuntaron las mismas fuentes.

Como parte de su plan de reestructuración, la empresa --especializada en la fabricación de mueble infantil y juvenil y con más de 40 años de trayectoria-- ha llevado a cabo cambios en la organización del personal y la gestión de costes y proveedores, entre otras medidas. Muebles Grabal confía en recuperar trabajadores en cuanto vuelva a repuntar su actividad.

El sector del mueble en Aragón genera unos 5.000 empleos directos entre venta y fabricación. Sus ventas han caído a la mitad desde que se inició la crisis.