EL GOBIERNO dio ayer un nuevo paso en el proceso de privatización de la gestión de los aeropuertos de Barcelona y de Madrid con la creación de un nuevo organismo que se dedicará a supervisar las tarifas de estas infraestructuras en el futuro. Este organismo, según el ministro José Blanco, tendrá mayor independencia del Ejecutivo de la que tenía hasta ahora la entidad que ejercía esta competencia.