La situación del etarra Arturo Cubillas, refugiado en Venezuela bajo el paraguas del Ejecutivo de Hugo Chávez, desató ayer otro cruce de reproches entre el Gobierno y el PP. El titular de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, aseguró que el Gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero trabaja para lograr la entrega del terrorista a España. Mientras, el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, y el presidente de la Audiencia Nacional, Ángel Juanes, apostaron por la aplicación del principio de justicia universal de "entrega o castigo".
En el Congreso, el ministro exigió a Venezuela "una respuesta definitiva" sobre los vínculos de ETA y las FARC en su territorio. Además, aseguró que el Gobierno va a utilizar todos los mecanismos diplomáticos, judiciales y policiales a su alcance para derrotar a los terroristas y "hacerles volver de ese país".
Estas palabras no satisficieron al portavoz de Exteriores del PP, Gustavo de Arístegui, quien acusó al Ejecutivo de falta de firmeza ante "la cooperación repugnante de un país que dice ser una democracia con una banda de asesinos sanguinarios". Moratinos replicó que la política exterior no "es más o menos firmeza", sino "resultados", y expresó su "pleno apoyo" a los jueces que investigan la relación de los etarras y la guerrilla colombiana.
TURNO DIPLOMÁTICO Por su parte, Conde-Pumpido y Juanes coincidieron en pedir a Venezuela que entregue o juzgue a Cubillas. El fiscal general del Estado aseguró que su departamento "va a llegar hasta el fondo" en este asunto.
Y el presidente de la Audiencia dijo que, tras reclamar judicialmente la detención del terrorista, ahora es el turno de diplomáticos y políticos.
Sin embargo, fuentes de la Audiencia Nacional matizaron que dicho tribunal no tiene intención de ceder a Venezuela la competencia para enjuiciar a Cubillas. También recordaron que España reclama al etarra por los asesinatos que presuntamente cometió en los 80. Ade-más, desconfían del proceso que ha incoado la fiscalía venezolana a instancias de Cubillas, por lo que aspiran a que el terrorista sea entregado a España.
Esas mismas fuentes explicaron que la fiscalía de Caracas investigará si Xabier Atristain y Juan Carlos Besance, presuntos miembros de ETA detenidos en septiembre, declararon bajo torturas que habían recibido un curso de formación en Venezuela y que Cubillas se hizo cargo de su estancia en ese país.
