El ministro de Economía, Rodrigo Rato, buscará hoy en Lanzarote el apoyo del ministro alemán de Finanzas, Hans Eichel, para que la UE adopte una actitud común ante el eventual aumento del precio del crudo que podría desencadenar una guerra con Irak. Rato afirmó ayer que, con los actuales niveles de precio del petróleo (por encima de los 32 dólares), es imposible la recuperación de la economía internacional y de la española, y opinó que sería "positivo" que se despeje cuanto antes la incertidumbre sobre una guerra.

La crisis iraquí centrará la 17 cumbre hispano-alemana que, hoy y mañana, se celebra en Lanzarote. José María Aznar y Gerhard Schröder, dos de los principales protagonistas de la fractura que sufre la UE por el conflicto de Irak, intentarán venderse mutuamente sus posiciones durante el forzoso cara a cara que mantendrán en Canarias. El encuentro ha despertado la atención internacional por ser la antesala de la cumbre extraordinaria que celebrará la UE para salvar los trastos de su política exterior.

POSTURA EUROPEA El presidente español defenderá que España siempre ha sido coherente con la postura europea acordada el 27 de enero y que se basa en dos puntos: el objetivo es el desarme de Irak y debe conseguirse con el papel central del Consejo de Seguridad de la ONU. Aznar argüirá que ésos son los "hechos básicos" y que "lo demás son interpretaciones" de la posición común, según una fuente de la Moncloa.

Schröder coincide en que hay que desarmar a Bagdad, pero considera que en las actuales circunstancias no se justifica una guerra, y reclama un mayor esfuerzo diplomático y más tiempo para los inspectores.

DIFICIL CONSENSO Ambas delegaciones ven con pesimismo cualquier posibilidad de consenso, pese a que, el jueves, en una conversación telefónica para preparar la cumbre, Schröder expresó a Aznar su interés en conocer de modo directo su opinión. Prueba del desencuentro es que, hasta ayer, no estaba prevista ninguna declaración conjunta.

En el terreno económico, Rato sí pretende captar la adhesión de Eichel para que en la próxima reunión de los ministros de Economía de la UE (el Ecofin), se analicen en profundidad los efectos de la escalada del petróleo. En un almuerzo organizado por el Foro ABC de la Nueva Economía, Rato dijo ayer que el petróleo es "la variable determinante" que encauzará o frustrará la anunciada recuperación de la economía. Los planes de crecimiento de los países europeos parten de que el precio medio del barril será de 24 dólares en el 2003.

Además, Rato instará a Eichel a que antes de junio presente al Eurogrupo un paquete de reformas estructurales que garanticen el crecimiento de la economía alemana.