Hasta nueva orden, el eterno tira y afloja entre el presidente palestino, Yasir Arafat, y su primer ministro, Ahmed Qurei, por el control de los cuerpos de seguridad de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) ha acabado con el rais como vencedor. Según el acuerdo que alcanzaron el viernes, las fuerzas de seguridad dependerán de un Consejo Nacional de Seguridad presidido por Arafat.
"El ministro del Interior será Hakam Balawi, quien tendrá autoridad sobre los asuntos administrativos, mientras que los asuntos de seguridad los dirigirá el Consejo Nacional de Seguridad que lidera Arafat", confirmó ayer en Ramala el propio Qurei. Balawi es un fiel de Arafat, que fue embajador de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en Túnez hasta 1994 y es miembro del Comité Central de Al Fatah.
Las decisiones están pendientes de ratificación por el comité central de Al Fatah y de la votación del Consejo Legislativo palestino.
SALVAR LA CARA No será ministro del Interior Naser Yusuf, el candidato de Qurei al que Arafat se oponía. Yusuf será miembro del Consejo de Seguridad y viceprimer ministro, según informó la radio israelí citando fuentes palestinas. También serán viceprimeros ministros Saeb Erekat, Nabil Shaat y Salam Fayed.
Israel se limitó a decir al respecto que "es un asunto palestino" y que lo importante es que la ANP tome la "decisión estratégica de luchar contra el terrorismo". Pero a nadie se le escapa que Arafat mantiene el control de los cuerpos de seguridad y que el hombre fuerte de la seguridad palestina será Yibril Rayub, asesor de seguridad nacional del rais.
Por lo tanto, Qurei podrá negociar en malas condiciones con el primer ministro israelí, Ariel Sharon, la aplicación de la Hoja de ruta , porque Israel siempre ha dicho que es inaceptable que Arafat mantenga el control de los cuerpos de seguridad.
VIOLENCIA Mientras, Gaza y Cisjordania vivió otro día de violencia, con la muerte de cuatro palestinos, entre ellos un chico de 14 años. En Yenín murió ayer un joven de 17 años cuando, según el Ejército, los soldados abrieron fuego tras recibir disparos. Tres palestinos, entre ellos dos niños de 7 y 9 años, resultaron heridos. Y en Gaza, otros dos palestinos fueron abatidos cerca de Netzarim, al sospechar los soldados que iban armados.
