El dictador Efraín Ríos Montt, caudillo del gobernante Frente Republicano Guatemalteco (FRG), afirmó ayer que iba a "ser el ganador" de las elecciones celebradas en medio de un clima de violencia en Guatemala.

No obstante, las encuestas señalaban que el abogado Oscar Berger, de la Gran Alianza Nacional (GANA, derecha), y el ingeniero Alvaro Colom, de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE, centro), disputarán la presidencia en una segunda vuelta, el 28 de diciembre. Sin embargo, Ríos Montt aún manejaba la baraja de las alianzas.

Casi 50.000 militares y policías, y unos 5.000 observadores, vigilaron el desarrollo de las elecciones presidenciales en el país centroamericano, en las que más de tres de los cinco millones de electores acudieron a votar. Como incidente remarcable de la jornada electoral, dos mujeres indígenas murieron asfixiadas y aplastadas cuando una multitud les pasó por encima en un colegio electoral situado en Chajul.