Abdelfatá Yunes fue durante muchos años uno de los hombres de máxima confianza de Muamar el Gadafi. De hecho, fue uno de los jóvenes oficiales que participaron en el golpe de Estado contra el rey Idris en 1969. No solo fue ministro del Interior, sino que fue el responsable de las fuerzas especiales del régimen y de la seguridad del propio Gadafi. Por eso no dejó de sorprender que el pasado 22 de febrero traicionara a Gadafi y se pasara a las filas de los rebeldes de Bengasi, ciudad natal de Abdelfatá Yunes.