Un activista denuncia el asesinato de dos indígenas en el Caribe nicaragüense

Dos indígenas mayagnas nicaragüenses han sido asesinados esta semana en el Caribe de Nicaragua por parte de colonos o invasores de tierras, denunció este viernes el activista Amaru Ruiz, defensor de los derechos ambientales y de los pueblos indígenas y afrodescendientes de su país. Los asesinados, que pertenecen a las minorías étnicas que luchan contra la explotación de los recursos naturales y la deforestación, fueron identificados como Serato Juwith Charly y Sergio Julian. Ruiz, presidente de la ambientalista Fundación del Río, exiliado y desnacionalizado por las autoridades nicaragüenses, dijo a periodistas que los dos indígenas fueron asesinados por colonos armados en el territorio Mayangna Suani, en el Caribe Norte de Nicaragua.

El miércoles pasado fue asesinado Serato Juwith Charly, de 23 años, mientras trabajaba en un terreno cerca de la comunidad de Kauhmakwas, precisó Ramírez, con base en el reporte que le dieron los mismos indígenas. Juwith Charly se encontraba con otros indígenas realizando labores de minería artesanal cuando fueron sorprendidos por miembros de una banda armada conocida como 'Chabelo', agregó. "Dos (indígenas) lograron tirarse al río y sobrevivieron", sostuvo.

El otro asesinato ocurrió el pasado 2 de julio entre las comunidades de Musawas y Betlehem, también en el Caribe norte de Nicaragua, cuando un juez comunal y el guardabosque Sergio Julián Juan, de 42 años, fueron atacados por colonos que invaden las tierras indígenas. Sergio Julián murió hace dos días producto de las heridas de balas, de acuerdo con la información.

Ruiz ha denunciado un presunto "etnocidio sistemático" del Gobierno de Daniel Ortega contra las minorías étnicas que luchan contra la explotación de los recursos naturales y la deforestación. "Los territorios Miskitos y Mayangna han sido atacados sistemáticamente durante casi una década, sin que las autoridades cumplan con su deber de protegerlos e investigar estos ataques, llevados a cabo por colonos y bandas criminales armadas en la Región Autónoma de la Costa Caribe Norte de Nicaragua", denunció, por su lado, el Centro de Asistencia Legal a los Pueblos Indígenas (Calpi). En una declaración, Calpi dijo que el 2023 ha sido un año "nefasto" para los indígenas, ya que solo en el territorio Mayangna Sauni As contabilizan nueve asesinatos, seis secuestros, cinco personas heridas, un intento de violación y la quema de una de sus comunidades.

La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh) condenó este viernes esos crímenes y demandó justicia al Estado de Nicaragua. "La Oficina llama al Estado a investigar y dar con los responsables de estos ataques, establecer acciones para evitar que estos hechos se repitan, y garantizar los derechos de las víctimas y sus familias a quienes expresamos nuestra solidaridad", indicó ese organismo a través de su cuenta de Twitter.

Las autoridades nicaragüenses no se han referido al asesinato de los dos indígenas mayagnas de esta semana.