El pasado 6 de febrero, coincidiendo como cada año con los festejos en honor a San Blas, el municipio de Pina de Ebro celebró la sexta edición del Encuentro de Dance.

En esta ocasión visitó la localidad la agrupación de Garrapinillos, cuyos componentes, junto con los danzantes anfitriones ofrecieron una muestra de esta tradición folclórica.

El dance de Garrapinillos está dedicado a la figura de la Virgen del Rosario y suele interpretarse a mediados del mes de julio, con algo de adelanto con respecto a su onomástica que tiene lugar el ocho de septiembre, pero coincidiendo con la celebración de los actos festivos dedicados a la Virgen del Carmen.

La historia de este baile es bastante accidentada, no se conoce con certeza cuáles pueden ser sus orígenes ni en que año comenzó a interpretarse. Por lo que se sabe, a lo largo del siglo XX se bailó únicamente en cuatro ocasiones: dos veces en los años veinte y otras dos en la década de los cuarenta, y luego desapareció.

Sin embargo fue recuperado en el año 2000 por un grupo de buenos aficionados a las tradiciones locales, quienes llevaron a cabo una ardua tarea para rescatar del olvido hasta el mínimo detalle de esta representación folclórica.

Testimonios orales

Aunque las interpretaciones musicales fueron recogidas en partituras en una investigación anterior, no existía ningún tipo de documento que sirviese como referencia para las mudanzas del baile o los versos de los dichos, pero afortunadamente no faltaban vecinos del lugar con edad y memoria suficientes para recordarlos.

Además también fue muy útil acudir a encuentros y festejos de dance, entre ellos precisamente el primero de los celebrados en Pina de Ebro, que sirvieron para comparar las investigaciones realizadas con otras manifestaciones muy similares.

Y así, tirando de los recuerdos se consiguió volver a sacar el dance a las calles de Garrapinillos, y con él el recitado de la "Pastorada", un cuerpo de versos en el que representa la lucha entre el bien y el mal personificada en un diablo y un ángel, en la guerra entre moros y cristianos y, como peculiaridad, en el enfrentamiento entre un cazador y un ranchero o pastor.

Vestuario del siglo XX

En cuanto al vestuario de los bailadores, tiene una inspiración claramente teatral pues no en vano es una copia lo más fidedigna posible del usado en los años veinte y cuarenta, que fue alquilado al Teatro Principal de Zaragoza.

En estos cinco años no ha disminuido el interés por el dance en esta población, y el número de integrantes de la agrupación no ha dejado de aumentar, especialmente con gente joven. De esta forma, y tras este último empujón, la permanencia del dance está garantizada.

GLORIA ABADIA