Este mes han finalizado las obras en el palacio del Conde de Aranda, donde el Ayuntamiento de Épila proyecta albergar un centro de día y la residencia de la tercera edad. Con el presupuesto del Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local se ha invertido medio millón de euros en la estructura metálica y de hormigón y los accesos de la residencia, una edificación de nueva construcción de cuatro plantas anexa al espacio que albergará el centro de día.

Estas obras no se pudieron acabar en diciembre porque la empresa adjudicataria, Gótico, se declaró en suspensión de pagos y hubo que volver a sacarlas a concurso. La constructora epilense Hernando Salanova ha sido la encargada de rematarlas tras el retraso sufrido. Además se ha colocado la tubería que conectará el futuro edificio a la red municipal de vertido.

Mientras se levantaba la nueva estructura de la residencia, se intervenía también en la fachada del palacio, limpiando y puliendo la piedra original y arreglando el zócalo, con el presupuesto de 210.000 euros procedente del Plan de Infraestructuras y Equipamientos Locales (PIEL) de la Diputación Provincial de Zaragoza. De hecho, ha quedado una parte sin arreglar y ahora el Ayuntamiento de Épila solicitará una siguiente fase para terminarlo.

Pero esta no será la única financiación necesaria para continuar con las obras del centro de día y la residencia, ya que para cumplir los objetivos que se marcó hace tres años el equipo de gobierno municipal, será necesaria la colaboración de las instituciones.

Con esta actuación se consigue, por un lado, tener estos equipamientos tan necesarios en el centro de la localidad, y por otro, restaurar y mantener el palacio, una vez frenado su deterioro con el arreglo de las cubiertas, la fachada y la consolidación de su estructura.