La construcción de un nuevo consultorio médico urgía en Alpartir, ya que las antiguas instalaciones se habían quedado obsoletas.
El nuevo centro, situado en el paseo Ramón y Cajal, es hoy una realidad, pero Marta Gimeno, la alcaldesa, reconoce que este proyecto ha requerido "un gran esfuerzo del Ayuntamiento y las instituciones que lo han subvencionado" desde que comenzaran los primeros trámites en 2004. A partir de entonces, el Ayuntamiento adquirió un terreno con una subvención de la DPZ de 30.000 euros, y seguro del apoyo de la DGA para desarrollar el proyecto.
Tras realizar un estudio geotécnico del terreno se puso en marcha un proceso de licitación, por el cual se adjudicó la obra a la empresa Construcciones Asenco.
EL EDIFICIO
El edificio consta de dos plantas de 200 metros cuadrados y un ático. El centro médico está en la planta baja, y cuenta con un vestíbulo, dos despachos para la médico y la enfermera, sala de espera, baños para mujeres, hombres, y discapacitados, un almacén y una sala de limpieza. En la primera planta y el ático --todavía sin acondicionar-- la intención del Ayuntamiento es "situar la sede de las asociaciones", expresó la alcaldesa, que recalcó la importancia de que en un municipio con 564 habitantes haya diez asociaciones y de que "tengan su espacio para desarrollar sus inquietudes".
En la primera fase de construcción, la inversión ascendió a 329.000 euros, que han subvencionado en un 98% la DGA, la DPZ y los Fondos Europeos LEADER, y en un 2% el Ayuntamiento de Alpartir. En la fase de equipamiento, la DGA aportó 11.000 euros en una primera actuación, a los que se sumaron 6.000 euros más de la Agenda 21 de la DPZ para finalizar.
MÁS CAMBIOS EN EL PASEO
A la par que las obras del consultorio, esta zona del paseo ha sido asfaltada y se han renovado el alumbrado, las infraestructuras de vertidos y del agua de boca. Con esta intervención se ha dotado al centro médico de buenos accesos y una zona de aparcamiento bien señalizada. Y se ha aprovechado la remodelación para trasladar el mercadillo a este lado del paseo, para dar más plazas a los comerciantes y más seguridad a los compradores, creando un entorno acorde con la estética del casco histórico.
