Los niños de Ambel participaron y disfrutaron en los diferentes concursos y talleres de calaveras, relatos de miedo y cocina terrorífica organizados por el ayuntamiento durante la festividad de Halloween. Incluso casas y calles se ambientaron para la ocasión con el fin de convertir el municipio en un escenario misterioso.

Ambel se transforma en lugar de historias y miedo

El vaciado y tallado de calabazas es una costumbre que se realiza desde hace años para estas fechas en Ambel. Son las conocidas calaveras, que posteriormente se colocan en el camino de las bodegas que lleva al cementerio durante el rezo del rosario el día de Todos los Santos. Esta actividad contó con la participación de mayores y pequeños y con ellas permitió decorar la localidad.

Ambel se transforma en lugar de historias y miedo

Ambel contó también con el I Concurso de relatos de miedo. En el maravilloso entorno de la iglesia de San Miguel, ambientada para la ocasión con las calaveras que se habían tallado por la mañana, los vecinos disfrutaron de esta actividad y conocieron la verdadera historia de El niño del Palacio de Ambel. Las tres ganadoras fueron Guadalupe Aznar (Ambel) en categoría Vampiro; Noa Pérez (Fuendejalón), en Fantasma; y Andrea Vidal (Fuendejalón), en categoría Zombie. Los vecinos del municipio pudieron asistir a la lectura teatralizada de los tres relatos ganadores.

Ambel se transforma en lugar de historias y miedo

«Estamos felizmente sorprendidos de la estupenda acogida que habéis dado a esta iniciativa en la que hemos recibido un total de 43 relatos de lugares tan diversos como San Agustín del Guadalix, Ambel, Magallón, Fuendejalón, Madrid, Zaragoza, María de Huerva y Borja. Agradecemos a las mujeres del club de lectura de la localidad su labor como jurado», destacó la alcaldesa de Ambel, Paula Trívez. «Damos por conseguido nuestro objetivo de poner en valor la rica tradición oral de nuestro pueblo, la joya de su palacio y su historia, así como las historias de vida de los que nos precedieron. Gracias a todos de corazón», añadió. El consistorio patrocinó el concurso y trabaja en la manera de acercar todos los relatos realizados a los vecinos y en la continuidad del certamen.

Otra de las actividades destacadas durante el puente de Todos Los Santos en la localidad fue La casa del terror. A las ocho de la tarde tuvo lugar el pase para los niños de hasta 12 años y, a las once de la noche, el turno a partir de esa edad y adultos. También se celebró una queimada y los asistentes pudieron comer pastas. La participación fue muy numerosa y mayores y pequeños disfrutaron de sustos y de una animación terrorífica preparada con esfuerzo y creatividad por un grupo de voluntarios de la localidad.

Ambel se transformó en un lugar de historias y misterios donde los jóvenes también pudieron participar en un taller de cocina terrorífica y elaborar sangrientos dedos amputados y garras de vampiro, entre otras recetas. Tampoco faltó la visita de muchos de ellos disfrazados de personajes siniestros por las casas decoradas para la ocasión para pedir caramelos bajo la petición de «truco o trato».

Las actividades de Halloween finalizaron con la «más auténtica y tradicional» de todas ellas, el paso del rosario con las calaveras colocadas en el Camino de las Bodegas al cementerio de Ambel. Los vecinos pudieron disfrutar de las 46 calaveras que participaron en un concurso donde el nivel es cada año mayor.