Expo Borja disfrutó del 22 al 23 de octubre de la presencia de 35 expositores, entre comercios, asociaciones e instituciones, lo que probó el dinamismo y la fuerza de una ciudad que goza de un comercio de proximidad de calidad, siendo un escaparate no sólo local sino también comarcal.

Los 1.475 metros cuadrados habilitados en el pabellón deportivo municipal ubicado en la calle Pilar Lorengar se distribuyeron en cuatro áreas. La primera de ellas situada en la pista central del pabellón albergó la feria comercial con 28 expositores dedicados principalmente al subsector del comercio y la organización de eventos, representantes del comercio local de Borja y de sectores variados, como alimentación, ropa y complementos, estética, floristería, decoración, electrodomésticos, materiales de construcción, electricidad, fotografía, hogar, diseño y viajes, entre la oferta.

Por su parte, la segunda área era la zona infantil dedicada a la ludoteca, que estuvo atendida por dos monitoras y con dos hinchables para niños. Y la tercera zona se destinó a la gastronomía con un servicio de bar y un espacio dedicado al descanso y a la convivencia donde se ubicó la carpa del ayuntamiento y el stand de Borja Comunicación, que en esta edición retransmitió en directo los eventos que se fueron realizando a lo largo de la feria.

Por último, la cuarta zona estuvo reservada a asociaciones y colectivos como Cruz Roja, la Protectora de Animales Borguau, la Asociación de comerciantes Borgia, la Asociación de discapacitados físicos Nuaetu, la Asociación de personas con capacidades diferentes, Punto Violeta de la Concejalía de Igualdad y la Comarca Campo de Borja. Además, los gigantes y cabezudos no quisieron perderse la cita y con su presencia contribuyeron a dar un ambiente festivo, sobre todo entre los más pequeños, repartiendo caramelos por el recinto y dejándose fotografiar.

«Un acontecimiento de este tipo posibilita la promoción no sólo de la ciudad de Borja y su comarca por el número de visitantes directos que esto supone, ya que se calcula que se superaron las 3.000 visitas, atendiendo a los boletos vendidos, con fines solidarios para la Fundación Sancti Spiritu y con los que se podía participar en el sorteo de cinco lotes de productos donados por los expositores», comentan desde el consistorio. Además, este año y gracias a Borja Comunicación se acercó la feria a más gente a través de los directos que llevó a cabo en las redes sociales de todas las actividades que se realizaron durante el evento, «lo que constituyó en esta edición una adaptación de Expo Borja a las nuevas tecnologías, señal de que es un evento dinámico y vivo». También supuso un avance importante en la publicidad y proyección de los expositores.

Durante la feria se celebraron degustaciones de productos, demostraciones, tratamientos de belleza, cuentacuentos, sorteos, conferencias sobre diseño, promociones y descuentos, además de una exhibición de escalada en el nuevo rocódromo. Una actividad que fue muy bien acogida por el público que se dio cita en el recinto ferial el sábado por la tarde.

«ExpoBorja incentiva tanto al comercio como a la población, pero también permite generar contactos y establece un verdadero centro de negocios donde se encuentra la oferta y la demanda en un espacio concreto, permitiendo la relación personal, el conocimiento de las reacciones de los clientes, conocer la competencia y descubrir nuevas tendencias en el sector, siendo un evento idóneo para acudir en familia», reconocen desde el consistorio.

Todos los expositores y empresas vinculadas a la feria, así como la Asociación de Comerciantes Borgia, trabajan de forma conjunta con el Ayuntamiento de Borja a favor del desarrollo económico de la ciudad, utilizando las herramientas puestas a su disposición, como fue el caso de Borja Comunicación, para incidir directamente en los segmentos que más potencialidad ofrecen para la ciudad de Borja: el comercio, la hostelería y el turismo.