Tras casi cuatro años de trabajos y una profunda renovación urbana de la ciudad, desde el 26 de marzo el Tranvía llega hasta Parque Goya, completando así la totalidad de la línea 1, que une Valdespartera con este barrio residencial. Han sido necesarios 1.315 días de obras en el proyecto de mayor envergadura ejecutado en Zaragoza después de la Expo. Con él queda articulada la ciudad a través de un medio de transporte ecológico que une ya los dos extremos de la línea: desde Mago de Oz en Valdespartera hasta la avenida Academia General Militar en Parque Goya en tan solo 41 minutos. Un proyecto que se ha terminado antes de lo previsto, si se comparan con los datos que ofreció en su día el alcade de Zaragoza, Juan Alberto Belloch.

La apertura por fases de la línea ha permitido ver la evolución de la demanda, que siempre ha superado las expectativas iniciales. Cuando llegó a Gran Vía las mejoró en más de un 20%, desde que lo hizo hasta las Murallas --último estreno, en diciembre del 2012-- ya las está rebasando en un 17%, y ahora queda por ver el resultado final, cuando se prevé mover unas 100.000 personas de media diaria, el doble de las que transporta ahora.

Falta solo la respuesta de la margen izquierda, desde el Actur hasta Parque Goya, que ofrece a los viajeros un recorrido de 15 minutos entre Academia General Militar y la parada de Murallas-plaza del Pilar, de 18 hasta la plaza de España, y de 20 hasta la de Aragón. Un tiempo imbatible para el autobús, que convivirá con el tranvía al menos hasta finales de mayo, porque la reordenación de líneas aprobada por el ayuntamiento está supeditada a la adjudicación de la nueva contrata. No obstante, esa demanda de 100.000 viajeros al día también se estimó sobre una oferta en la que las líneas que circulan en paralelo al trazado del Actur ya no existirían, por lo que tampoco es descartable que esta vez la cifra sea inferior a la prevista.

Al margen de la demanda, quedan incógnitas por despejar sobre la línea que, ahora sí, se someterá al examen riguroso de los usuarios. La puesta en servicio del trazado completo permite un análisis más real, tanto para los que suban al Urbos 3 como para los que ahora se verán obligados a convivir con él en las calles. No obstante, el estreno de la línea completa se verá pronto afectado en su funcionamiento, ya que está previsto que se interrumpa la circulación por el centro por las procesiones de Semana Santa en Jueves Santo y Viernes Santo.

COLUMNA VERTEBRAL

El estreno del servicio completo del Tranvía supone la culminación de una línea que se convierte en columna vertebral de la ciudad, conectando el norte con el sur y facilitando el desplazamiento diario a decenas de miles de ciudadanos. El Centro Histórico, los nuevos barrios de Parque Goya y Valdespartera; las áreas universitarias de San Francisco, Gran Vía y el campus Río Ebro, los hospitales o los centros deportivos están más unidos ahora. Pero Zaragoza también estrena ciudad. La construcción de la Línea 1 ha supuesto una gran revitalización urbana gracias a la renovación de paseos, plazas y avenidas, con una apuesta clara por la peatonalización y los entornos humanos, hechos para las personas y su día a día. Se ha renovado una superficie de 147.000 metros cuadrados con nuevas aceras y se han ganado más de 73.000 metros cuadrados de zonas ajardinadas para el disfrute de toda la ciudadanía. El Tranvía constituye también una apuesta por el medio ambiente, dentro de la nueva cultura de la movilidad.