La imposición de denuncias de tráfico ha caído en picado en Aragón. La huelga de celo que protagoniza la Policía Local de Zaragoza desde mediados de diciembre, unida a la de la Guardia Civil en toda la comunidad desde hace mes y medio ha rebajado a la mitad el número de sanciones.

Los agentes tan sólo denuncian por delito, infracción grave o a requerimiento del ciudadano. En las carreteras se castigan casi únicamente las conductas temerarias. En la capital, ninguno de los más de mil policías pone multas de motu proprio , por ejemplo, a un coche mal aparcado. La plantilla municipal decide hoy si intensifican la movilización y reducen a un tercio los efectivos en la calle la próxima semana.

Las secciones sindicales aseguraron ayer que el número de expedientes por denuncias de Tráfico se ha reducido a la mitad, un porcentaje que se acerca al 60% en el caso de sanciones por incumplimiento de ordenanzas --ruidos, pintadas, rotura de mobiliario y horarios de bares, entre otros--. "La retirada de coches ha bajado menos, un 33%, porque la contratista de las grúas --Dornier-- palía la estadística con la retirada de coches abandonados", apuntó el delegado de UGT Miguel Angel Yagüe.

MENOS INGRESOS En su último boletín, el sindicato señala que entre enero y febrero del 2004 se retiraron casi 3.000 vehículos, y ha caído a 2.000 este año: "El consistorio ha dejado de ingresar 58.212 euros".

El secretario de la Confederación de Seguridad Local, Tomás García, adelantó que propondrán hoy en una asamblea endurecer las medidas ante la negativa oficial a recibir a los sindicatos. Si se aprueba, los agentes se encerrarán a lo largo de la próxima semana en el consistorio, hasta el pleno del viernes. De forma paralela, se celebrarán asambleas, a las que podrán asistir legalmente dos tercios de la plantilla. Así, apenas habrá agentes en la calle.

El delegado de Economía y Hacienda, Alberto Lafuente, reconoció ayer indirectamente los efectos de la movilización en la comisión de Economía. A una pregunta del PP, Lafuente señaló que los derechos reconocidos netos por multas se han reducido a la mitad en los dos primeros meses respecto al 2004. No obstante, dijo que era "prematuro" hablar del grado de ejecución.

REPERCUSION La oposición hizo su lectura. El edil popular Ricardo Mur señaló que o los ingresos se han "inflado" para gastar más o el "conflicto" entre el equipo de Gobierno y los policías "no sólo tiene repercusión en los servicios sino en lo económico". Y añadió: "No compartimos que ni siquiera acepten reunirse con sindicatos".

El portavoz del PAR, Manuel Blasco, tildó de "preocupante" el descenso recaudador un año en el que se ha "disparado" la previsión un 80%.

Por su parte, la protesta de la Guardia Civil nació con una iniciativa espontánea de los agentes difundida vía mensaje de móvil ante el incumplimiento de las promesas de democratización y desmilitarización del cuerpo del Gobierno. Desde el 1 de febrero, la mayoría de la plantilla ha sustituido las denuncias por recomendaciones a los conductores que sorprenden cometiendo infracciones que no afectan a la seguridad, explicaron fuentes del cuerpo.

En Aragón, la movilización ha causado una espectacular reducción de las multas: en Teruel, cayeron un 80% en febrero pasado con respecto al del 2004; en Huesca quedaron por debajo del 50%, al pasar de 2.700 a 1.300, y en Zaragoza capital se impusieron 613 menos que el mismo mes del año anterior. Más de un agente no ha puesto denuncias este mes.

Un portavoz oficial de la Guardia Civil declinó ayer valorar la protesta.

Fuentes del cuerpo explicaron que, en caso de sorprender a un conductor sin cinturón, por ejemplo, "los agentes le dicen que se lo ponga y que tenga cuidado antes de dejarle seguir circulando". Otra cosa es, añadieron, "que se trate de hechos que atenten contra la seguridad en el tráfico, como excesos de velocidad o alcoholemias. Eso son infracciones graves y, en ocasiones, delitos; y hay que perseguirlo".