El plan de obras no plantea el cambio de ubicación de los pasos de cebra. Tan solo desaparecerá uno. Se trata de uno de los que que une el sector de Lanuza con el Mercado Central. El resto, se mantiene invariable, y tampoco se realizarán actuaciones en las aceras, así que los viandantes podrán realizar sus recorridos habituales. Esto será así hasta que toque realizar las vías del tranvía precisamente en la zona del paso de peatones. En ese momento puntual, los pasos se desplazarán unos metros hasta una zona en la que los raíles ya estén construidos. Esta modificación también traerá consigo una pequeña actuación de rebaje de las aceras para que las personas con movilidad reducida puedan seguir cruzando con normalidad.