El boom del porcino parece no tener límites en Aragón. Las solicitudes para abrir granjas de cerdos, la llegada de importantes empresas del sector y los proyectos de ampliación de las fábricas ya asentadas en la comunidad no han dejado de crecer en los últimos años, convirtiendo a esta industria en una de las grandes esperanzas económicas de la región gracias a la pujanza de sus exportaciones. Un dato evidencia el meteórico crecimiento del sector en Aragón: la comunidad ya es la principal productora a nivel nacional de ganado porcino. En concreto, el censo del Ministerio de Agricultura contabilizaba a finales del año pasado en Aragón 7,88 millones de cerdos, frente a los 7,7 de Cataluña. Entre ambas, superan el 51% del censo nacional.
Este liderazgo ha sido posible gracias al boom de nuevas explotaciones, pero también al parón registrado en Cataluña desde el 2015. «Su censo se ha estabilizado y se ha visto limitado por los condicionantes ambientales de disponibilidad de tierra agrícola», explica el director del Centro de Investigación de Tecnología Agroalimentaria (CITA), José Antonio Domínguez, que es coautor del reciente informe El sector porcino aragonés: instrumento de desarrollo económico y social. Según el estudio, Aragón cuenta actualmente con 3.884 explotaciones. La gran mayoría son cebaderos (3.308) y tienen una capacidad inferior a las 3.000 plazas, acogiendo al 67% del total de cerdos.
EL 65% DE LA PRODUCCIÓN FINAL
Aunque Aragón ya es la principal productora, Cataluña se mantiene como líder en términos económicos. Así, el valor de la producción porcina aragonesa rondaba en el 2017 los 1.535 millones de euros, mientras que en la comunidad vecina alcanzaba los 1.600 millones. No obstante, este indicador se ha triplicado en Aragón en los últimos años, ya que en el 2000 apenas superaba los 640 millones de euros. De hecho, el sector porcino representa actualmente en la comunidad el 65% de la producción (riqueza) final ganadera, mientras que en el 2000 suponía el 48%.
Sin duda, la tarea pendiente que tenía Aragón con este sector era la creación de más valor añadido. «Hasta no hace muchos años solo sacrificábamos el 40% de los cerdos que producíamos, cuando es de sobra sabido que lo que más dinero y empleo genera es la industria agroalimentaria transformadora que se desarrolla en torno al sector», explica Domínguez, que apunta que esta situación va a cambiar radicalmente gracias a los nuevos proyectos empresariales previstos en Aragón.
El crecimiento del sector, impulsado por el tirón de las exportaciones, se ha cimentado estos últimos años en la provincia de Zaragoza gracias a la expansión de Grupo Jorge en Zuera y Cárnicas Cinco Villas en Ejea.
