Protocolo es una de las empresas que rompe moldes en el textil aragonés. La empresa es un referente en trajes de novio en España y crece con fuerza en el mercado latinoamericano, sobre todo en México. Fue fundada hace 29 años por Mariano García, que procede de una saga familiar con experiencia en el sector desde 1908.

Su producción se concentra en talleres de Teruel (Textil Rams, en Mazaleón) y Portugal. Actualmente cuenta con 13 tiendas propias en España y una plantilla de 31 trabajadores. Hace siete años, y ante la caída constante del número de bodas, la firma dio el salto al exterior, que ya suponen el 20% de sus ventas, que superan los 5 millones de euros.

«Apostamos por la marca España, la máxima calidad y el diseño propio. Esa es nuestra receta de éxito», asegura García, quien destaca que existe un nicho de público que no solo busca el precio. «En lugar de comprar a China, el textil español debe exportar diseño, clase y calidad», apunta.

Protocolo ha cosechado su mayor éxito exterior en México, donde tiene tienda propia en la capital azteca y en un mes abrirá el octavo punto de venta en ese país. De cara al futuro, la empresa prevé entrar en EEUU, Chile y Perú.