El hombre al que una amiga pedía hasta 12 años de prisión por violarla en Zaragoza ha sido absuelto de todo delito por la Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Zaragoza, cuyos magistrados ven indicios de despecho en la motivación de la denuncia. Los hechos que consideran probados son sustancialmente distintos a los que sostenían las acusaciones, basados en el último testimonio de la denunciante. Un relato que cambió varias veces en aspectos sustanciales, lo cual es otro de los motivos de la absolución.

La mujer declaró que el ahora absuelto, C. G. V., era amigo suyo y le pidió quedarse en casa, tras lo que abusó sexualmente de ella. Pero los testimonios del acusado y su pareja, e incluso parte de lo que reconoció la víctima, les llevó a modificar la narración probada.

Así, la sentencia se remonta a un tiempo antes de la noche de autos, cuando acusado y acusadora se conocieron y este le aseguró que no tenía pareja desde que había llegado de Rumanía, donde había dejado un hijo. Pero la mujer indagó por las redes sociales y descubrió que sí, lo cual le fue corroborado cuando le contestó una mujer una de las veces que llamó.

Tras descubrirlo, la denunciante le reprochó que le hubiera mentido y él reconoció que tenía pareja y que le era infiel. Ella incluso telefoneó a la mujer para advertirle de que le engañaba.

Esto no fue obstáculo para que acabaran quedando y teniendo relaciones. Por la mañana llamó la pareja de él, y la mujer le dijo que habían estado toda la noche haciendo el amor, que se iban a vivir juntos. La pareja fue a la casa y tras tomar un café los tres en un bar, él pidió perdón a su pareja y se fue.

Entonces fue cuando ella fue al centro de salud y denunció una violación de su pareja; ante el forense dijo luego que fue de un conocido con el que tenía sexo esporádico, y ante la Policía, que era un amigo.

Todas estas circunstancias llevan a los magistrados a poner en duda la veracidad de la acusación, que pudo venir motivada por el despecho. Además, recuerdan, uno de los requisitos para la condena es mantener la misma acusación de forma sostenida, lo que no sucede. Tampoco las pequeñas lesiones en la vulva son incriminatorias, ya que son compatibles con una relación sexual consentida.

Por todo esto, el acusado, defendido por Carmen Sánchez Herrero, ha sido absuelto.