Agapito Iglesias, constructor e imputado en los casos saqueo y pagarés de Plaza, se embolsó casi 1,8 millones de euros limpios --netos, tras tributar y cotizar-- en los dos años previos a la declaración de insolvencia de sus dos empresas-emblema: el Real Zaragoza SAD y Codesport.
Ese dato, entre otros, figura en las diligencias del caso pagarés, cuyo instructor, Francisco Picazo, titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Zaragoza, ha ordenado a la Agencia Tributaria --a petición de la abogada de UPD, Irene Romea, que ejerce la acción popular en la causa-- que designe a un perito para que analice "los flujos económicos y patrimoniales de los imputados (en la causa), con estudio de cuentas bancarias, declaraciones tributarias o cualquier otra documentación de los ejercicios 2005 a 2010, inclusive".
En el primero de esos dos años, Plaza adjudicó a Codesport por catorce millones la construcción, llave en mano, de 80 naves que, tras negociar los responsables de la empresa pública con Autocity, pasaron a ser 120 de menor tamaño. Iba a comprarlas la sociedad de Carlos Oehling, que al final solo se quedó las primeras.
PAGARÉS
La plataforma logística liquidó la contrata con la constructora de Iglesias por más de 32 millones en una operación en la que el instructor ha detectado "suficientes indicios" de un presunto desfalco de más de catorce millones, ya que un informe pericial cifra en solo 3,5 el coste del aumento de obra. Plaza pagó parte de esa cantidad con cuatro pagarés que suman 8,7 millones de euros, tres de los cuales vencían en junio del 2010.
El juez Picazo ha imputado en la causa al exgerente de Plaza, Ricardo García Becerril, y al exconsejero delegado, Carlos Escó, firmantes de los pagarés y a los que imputa un delito de administración desleal y otro de malversación del que señala como cooperador necesario a Iglesias, a quien atribuye la autoría de una estafa. En la causa está también encartado el exdirector técnico de la plataforma logística, Miguel Ángel Pérez, que no aparecía en las diligencias cuando UPD solicitó la prueba.
Agapito Iglesias ingresaba anualmente algo más de 120.000 euros brutos como sueldo de sus empresas, cifra a la que algún año, como el 2010, sumó más de un millón en dividendos, intereses y alquileres. Al año siguiente ingresó más de medio millón en bruto por ventas de patrimonio.
Los primeros datos sobre el patrimonio de los imputados en el caso pagarés que conoce el juzgado revelan que el sueldo del exgerente de Plaza era superior en alrededor de un 50% al que recibía el presidente de la DGA en aquellos años: más de 120.000 brutos, con unos 6.000 en especie, frente a los 80.000 de Marcelino Iglesias.
PATRIMONIO
Con ese sueldo, según revelan las pesquisas del caso saqueo, García Becerril y su familia --sus hijas Patricia y carolina trabajan desde mediados de la década pasada en la polifacética empresa Pulsar y su esposa Elena es ama de casa--, los García Planté, lograron acumular un patrimonio inmobiliario de alrededor de dos millones de euros.
El salario bruto de Escó fue de más de 180.000 euros en el 2010. En Telefónica su salario se disparó hasta el cuarto de millón de euros anuales. Y la renta le salía a devolver.
