E sindicato CCOO calificó ayer de "inhumanos" los horarios de trabajo impuestos por la contratista del transporte urbano de Zaragoza (TUZSA) a su plantilla tras el tradicional recorte veraniego de la flota de autobuses.

La sección sindical asegura que es "imposible" cumplir los horarios porque los cuadros de marcha de las líneas de autobús en condiciones normales son ya muy ajustados. "El factor humano ha cedido para primar el beneficio empresarial", continúan.

Las frecuencias impuestas para este verano implican que los autobuses tengan teóricamente que circular a una velocidad comercial de 18 o 19 kilómetros por hora cuando la media es de 13 km/h. "Si bien la reducción del servicio puede llegar hasta el 40%, el beneficio empresarial sólo se reduce un 16%", expresa el comunicado de CCOO, que subraya que la diferencia sólo es posible si se "exprime" más al trabajador.

Los empleados de TUZSA entienden que el transporte público tiene una consideración de servicio público, por lo que debe mejorarse. "Tenemos un límite que no se debe traspasara con la única meta de obtener un óptimo beneficio empresarial a costa de la salud del trabajador", concluyen.