Cerca de un 19% de la población aragonesa, concretamente un 18,8%, tiene contratado un seguro privado de prestación de asistencia sanitaria, según los datos del 2017 proporcionados por el Informe Estamos Seguros de la Asociación Empresarial del Seguro (Unespa). El dato confirma la tendencia creciente del sector en la comunidad desde el 2012, aunque la evolución sigue siendo tímida y está lejos de los datos del 2009 y 2010, cuando el 23,17% y el 26,15%, respectivamente, de la población disponían de un seguro privado de salud.
Por provincias, Zaragoza es la que más polizas privadas sanitarias tenía en el 2017 en la comunidad, al alcanzar a un 19,87% de la población; seguida de un 17,52% en Huesca y un 13,24% en Teruel. Las cifras generales de Aragón, con un 18,8% de seguros privados entre la población, la sitúan como la quinta autonomía con más salud privada, solo superada por Madrid (30,37%), Cataluña (27,63%), Baleares (26,83%) y País Vasco (19,85%).
El seguro privado de salud cubre tanto la asistencia sanitaria de sus clientes como el pago de subsidios por enfermedad. Los datos aportados en esta información se refieren, únicamente, a la prestación de la asistencia sanitaria. Se trata de una opción entre la población aragonesa que vivió su punto más álgido en los años 2009 y 2010 donde, pese a la crisis, se mantuvieron estas contrataciones.
LISTAS DE ESPERA
Sin embargo, la gran caída se produjo en el 2011, cuando se pasó de un 26,15% de la población con póliza en el 2010 a un 16,31% en el 2011. A partir de entonces, la recuperación ha sido lenta pero constante y, en ningún momento, ha vuelto a descender hasta alcanzar el 18,8% del 2017, último dato de los que se dispone.
La crisis económica y la negativa situación laboral llevó en su momento a muchas personas a desprenderse de estas contrataciones privadas. Sin embargo, en términos generales la cifra de personas aseguradas en el país va en aumento año tras año debido, entre otras cosas, a la evolución de las organizaciones aseguradoras, que aplican mejoras en la accesibilidad de los servicios, pero también al estancamiento de las listas de espera quirúrgica en la sanidad pública. Muchos pacientes buscan celeridad a la hora de acceder tanto a una intervención como a la realización de pruebas médicas.
LA DESGRAVACIÓN DE RUDI
Por otro lado, en la comunidad se impulsó, por parte del Ejecutivo de Rudi (PP), la desgravación fiscal de los seguros médicos privados. Esta supuso, según informó la DGA en su momento, un desembolso de 2.1 millones de euros para las arcas autonómicas desde su aplicación, en los presupuestos del 2014. La medida también se extendió durante el 2015 y fue eliminada en el 2016, en los primeros presupuestos del Gobierno de Javier Lambán (PSOE).
El Ejecutivo socialista criticó la medida y el exconsejero de Sanidad, Sebastián Celaya, lo calificó como un «ataque frontal» a la sanidad pública.
La medida permitía a los suscriptores de seguros médicos privados ahorrarse hasta un 10% de la prima abonada al ser ese el importe deducible de la cuota íntegra autonómica.
