El Consejo de Gobierno de Aragón ha aprobado este martes la declaración de Inversión de Interés Autonómico para cuatro proyectos empresariales relacionados con economía circular, renovables y reciclaje, que dejarán una inversión de 90 millones de euros y la creación de 615 empleos directos.

En concreto, se trata de la instalación de una planta dedicada a la producción de bolsas biodegradables en Pedrola (Zaragoza), la construcción de una nueva planta fotovoltaica en Andorra (Teruel), la ampliación de una planta de reciclaje de plásticos en la localidad turolense de Escucha y la creación de otra nueva en la vecina Montalbán, así como otro centro similar en Gurrea de Gállego (Huesca).

La consejera de Economía, Industria y Empleo, Marta Gastón, ha destacado en rueda de prensa la apuesta por la economía circular sumada a la I+D+i, así como el trabajo en equipo con estos grupos empresariales para captar estas inversiones, que con esta declaración verán reducidos a la mitad los plazos de sus trámites administrativos.

En primer lugar, la empresa Sphere, que ya opera una fábrica en Utebo, instalará una segunda planta en el polígono industrial El Pradillo, en Pedrola, donde invertirá cerca de 40 millones de euros y prevé crear 35 nuevos puestos de trabajo directos y otros 46 indirectos.

Este proyecto está centrado en la fabricación de bolsas de diferentes tipologías con polietileno, biopolímeros biodegradables y materiales con alto contenido en reciclados.

Este nuevo complejo facilitará la diversificación industrial en esta zona de la Ribera Alta del Ebro, muy dependiente en la actualidad del sector automovilístico.

En segundo lugar, ha recibido también la Declaración de Inversión de Interés Autonómico la planta fotovoltaica Mudéjar I que el Grupo Samca promueve en Andorra con una potencia instalada de 49,98 megawatios.

La inversión en esta planta será superior a los 25 millones de euros y la previsión de generación de energía se sitúa en los 82 gigawatios anuales.

En cuanto a la creación de empleo, se prevén 250 contrataciones para la fase de construcción y otros 25 estables durante la fase de explotación y vida útil de la planta, que será de al menos 20 años.

Gastón ha resaltado también el impacto directo y sostenido que generará en el propio municipio gracias a los ingresos derivados de que los suelos sean íntegramente de su propiedad o a través de la recaudación de impuestos como el de Actividades Económicas o el de Bienes Inmuebles.

Ha recordado, asimismo, que esta inversión se ha visto favorecida por la aprobación del Decreto-Ley 4/2019, que entre otras cuestiones obliga al Gobierno de Aragón a valorar la especial relevancia de aquellos proyectos que se desarrollen en las comarcas mineras.

También en las Cuencas Mineras, la empresa General de Polímeros (Genepol) introducirá una nueva línea productiva en su planta de Escucha, a lo que hay que añadir un nuevo centro situado en el municipio de Montalbán, que promueve en este caso la compañía Politer Reciclaje, del mismo grupo empresarial.

La nueva línea de producción en Escucha tiene como objetivo duplicar la capacidad productiva de la factoría, así como mejorar la productividad y aprovechamiento del plástico con un aumento del rendimiento a un 55-60 por ciento, gracias a la adquisición de maquinaria de mayor tamaño y prestaciones para fabricar granza de polietileno reciclada de baja densidad.

El objetivo es incrementar la cuota de mercado internacional, contará con una inversión de 3,4 millones de euros y prevé sumar otros 15 puestos de trabajo indefinidos a los 42 ya existentes durante los ejercicios 2020 y 2021.

En Montalbán, Politer Reciclaje plantea una factoría de reciclado de plásticos con dos líneas de producción que comenzaría su actividad en mayo de 2021.

La inversión total estimada es de 6,2 millones de euros, mientras que la previsión de creación de empleo es de 35 nuevos puestos.

Por último, la compañía Dana Reciclajes plantea otro proyecto de economía circular en Gurrea de Gállego, con una inversión total de 19 millones de euros y la creación de 315 puestos de trabajo directos, más de un centenar de ellos durante la primera fase.

La primera fase se desarrollará entre 2019 y 2021 e incluye la compra de terrenos, la construcción de las instalaciones y el montaje de las líneas de reciclaje de aerosoles, extintores, envases, PVC, residuos eléctricos y electrónicos, airbag y cinturones de seguridad.

Entre 2021 y 2023, se acometerá el montaje de una segunda línea de reciclaje de aerosoles, cuatro de plásticos, otra de extrusión y una última de reciclaje de blíster y gestión de productos envasados, mientras que hasta 2025 se instalarán cinco nuevas líneas de reciclaje de plásticos y otras siete de extrusión.