La Subdelegación de Defensa en Teruel celebró ayer el Día de la Subdelegación de manera especial, ya que conmemoraba su 25 aniversario. Durante el acto, el encargado del área en Teruel, Miguel Juliá, recordó que es una institución «abierta» a los ciudadanos, a los que presta servicios como la biblioteca, el de reclutamiento o la divulgación de la cultura. También destacó el «esfuerzo» de la subdelegación para trabajar en la calidad, especialmente durante los últimos años cuando se ha conseguido el certificado de excelencia «que pocas instituciones tienen» y que requiere un esfuerzo constante, dijo.

En este 25 aniversario aludió también a la labor de difusión de la cultura de Defensa que a lo largo del último año han desarrollado a través de exposiciones, conferencias y la participación en ferias de empleo. Además, Juliá resaltó el trabajo hecho para adaptarse a los cambios normativos, los procedimientos y las plantillas para «ser más eficientes».

Por otro lado, incidió en que la celebración del acto supone renovar el «compromiso con España» cuando «unos pocos y desde distintos ámbitos cuestionan» este proyecto común.

Ayer también se entregaron reconocimientos, como la Cruz de Mérito Militar don distintivo blanco al teniente coronel de la Guardia Civil José Rafael Soler y la Cruz al Mérito Aeronáutico con el mismo distintivo al guardia civil Ramón Quílez.