Ecologistas en Acción-ADEPA ha denunciado al Ayuntamiento de Biescas ante el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil, por la creación y "gestión" de una escombrera-vertedero en su término municipal, que supone "un atentado" contra el medio natural y un "foco de contaminación" del Gállego.

Ecologistas ha interpuesto la denuncia además ante la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y la consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Aragón .

MARGEN DERECHA Entre las irregularidades observadas, la organización ecologista advierte de que la escombrera se sitúa en la margen derecha del río Gállego, un kilómetro aguas abajo de la desembocadura del barranco de Arás, en un terreno que pertenece a la Zona de Policía del río con una superficie aproximada de 2,5 hectáreas.

Para su ejecución denuncian que se ha eliminado la vegetación de ribera y se ha excavado una profundidad media de 6 metros y en la actualidad se ha procedido a un cubrimiento parcial de 1,5 hectáreas, "con lo que se pretende ocultar un foco activo de contaminación".

En el acceso se encuentra un cartel en el que se informa que para depositar escombros hay que "solicitar la llave en el ayuntamiento de Biescas", de lo que la organización ecologista deduce que esta entidad es "la responsable de esta actividad".

Entre los materiales se observan residuos tóxicos y peligrosos como baterías y acumuladores, maderas tratadas, envases de pintura y barniz, aceites de motor, disolventes, amianto y cadáveres de animales, entre otras, a pesar de que, según la legislación, estos residuos "precisan de un tratamiento especial".