Los residentes en la calle Jimeno Correas del Actur han mostrado su malestar por el deterioro que ha sufrido una zona verde de esta vía peatonal, supuestamente, a raíz del reventón de una tubería producido en el mes de agosto.

Según indicó un vecino, en el momento en el que se registró la avería llegaron rápidamente los técnicos municipales y cortaron el agua que da servicio al riego de un jardín público frente a los números 24 y 26. "El césped se ha secado y el mismo paso seguirán los árboles si no se procede rápidamente a subsanar esta anomalía", explicó. Indicó además que desde los inmuebles cercanos se ha avisado en varias ocasiones al Ayuntamiento de Zaragoza para que acudiesen a reponer el sistema de riego, sin que hasta la fecha se haya obtenido resultado.

La calle Jimeno Correas se encuentra dentro del perímetro en el que las brigadas de Vialidad y Aguas van a acometer próximamente la renovación de la red de tuberías entre las calles Pablo Ruiz Picasso, Ranillas, Gómez de Avellaneda y Valle de Broto. Se trata de la tercera fase de un plan integral que se inició hace unos años y que progresivamente tiene previsto sustituir los conductos de fibrocemento que se instalaron a principios de los años 80 por otro material de mayor resistencia.

Para ejecutar estos trabajos, el consistorio dispone de una serie de partidas genéricas como los 1,2 millones de euros reservados para piezas y repuestos, 125.000 para renovar válvulas y otros 720.000 para intervenciones en tramos completos de agua y vertido en la ciudad de Zaragoza. Además, se destinará también a la intervención del Actur parte del presupuesto destinado a obras menores.

RENOVAR LA RED En los últimos años, los fallos en la red de abastecimiento del barrio Actur han sido constantes debido a que las tuberías que se instalaron a finales de los años 70 (cuando comenzó la urbanización del distrito) se colocaron a muy poca profundidad de forma que el peso de los vehículos las ha ido deteriorando.

Precisamente, ésta es otra de las denuncias de los vecinos de la calle Jimeno Correas ya que pese a tratarse de una vía peatonal, no resulta raro encontrar todo tipo de vehículos transitando por ella. Al margen del deterioro de las baldosas y la red subterránea, se teme que puedan producirse atropellos.