Los ocho años transcurridos desde el hallazgo del cadáver maniatado de Luis Bernal López en su vivienda del barrio de La Magdalena no han evitado que el Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Aragón haya podido esclarecer este crimen. Según fuentes consultadas por EL PERIÓDICO, los investigadores han podido dar con el paradero del supuesto autor material de este asesinato, Vasile Corp. Las pesquisas, que están secretas por orden de la titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Zaragoza, no solo le localizan en la vivienda de la víctima, sino que le atribuyen el crimen.

Este arresto se une al de Brahim Nasri que practicaron hace unas semanas los agentes y con el que pudieron acotar las investigaciones. Dieron con su paradero después de que sus huellas aparecieran impresas en una bolsa de plástico en la que había unas tijeras y que apareció junto al número 3 de la calle Cortesías en la que vivía la víctima. Ambos detenidos permanecen actualmente en prisión provisional por estos hechos.

El asesinato de Luis Bernal conmocionó a sus vecinos, quienes le conocían como Luisito. De 51 años, separado y padre de dos hijos era muy conocido en el barrio gracias a su carácter afable y por su trabajo como cocinero, si bien en el momento del crimen se había jubilado por problemas de salud.

El cadáver de este hombre fue encontrado sobre la cama, atado de pies y manos y con el rostro desfigurado como consecuencia de los golpes que le dieron. De hecho, le rompieron dos costillas y la mandíbula pero los forenses del Instituto de Medicina Legal de Aragón (IMLA) consideraron que el fallecimiento se produjo por asfixia, después de un factura triple de tráquea.

Una brutalidad en la agresión que se relacionó desde el primer momento con el menudeo de drogas y, por tanto, con un vuelco, que en el argot delincuencial es el robo entre traficantes. Una sustracción que por el resultado se le fue de las manos al ahora detenido. No es el único caso de estas características ocurrido en Zaragoza, ya que un joven senegalés, Lamine Gueye, falleció en el 2013 y el dominicano Ariel Carrasco fue asesinado en el robo de cocaína en el año 2015.