Triste es un remoto pueblo de Huesca con tan solo una docena de habitantes: seis hombres y seis mujeres que en su mayoría forman parte de una misma familia, pero sobre ellos pesa una losa: la de llevar el nombre de municipio menos alegre de España. De la mano de la marca de helados Frigo, los habitantes de este pueblo han decidido quitarse la fama equivocada de aburridos y han cambiado de nombre por un día: de forma simbólica ayer Triste se llamó Alegre.

"Buscando casa en la zona de Huesca, un promotor nos llevó a Triste a ver unos terrenos sin decirnos dónde íbamos, ya que tenía miedo de perder la venta si nos mencionaba el nombre del pueblo. Cuando llegamos y vimos el cartel, nos pareció tan curioso que decidimos quedarnos", explica Marie Noël Vacher, vecina del municipio.

"Nos vemos obligados a aclarar continuamente que somos gente abierta y nos tomamos los comentarios con mucho sentido del humor", asegura, por su parte, Merche Cirés, la alcaldesa de esta localidad.

Prueba de ello es que los tristinos quisieron ayer demostrar que en su pueblo hay vida y que sus habitantes también son divertidos. Y la original iniciativa se llevó a cabo coincidiendo con la elección de este pueblo como escenario de la nueva campaña promocional de Frigo para adelantar el verano.

Como no podía ser de otra forma, el rodaje se convirtió en uno de los acontecimientos del año en el municipio y buena parte de sus habitantes se transformaron en actores por un día. Y la alegría llegó además en forma de helados, repartidos entre vecinos y curiosos.