Este próximo sábado se va a proceder en el cementerio de Las Mártires de Huesca a la exhumación de 12 vecinos de la localidad de Angües, muertos en 1937 y enterrados en el camposanto de la ciudad. La Asociación por la Recuperación e Investigación contra el Olvido (Arico) impulsa esta acción y cuenta con la ayuda, según informaron ayer de las asociaciones memorialistas Círculo Republicano Manolín Abad (Huesca), el Batallón Cinco Villas (Ejea de los Caballeros) y la asociación Charata (Uncastillo). La exhumación también cuenta con una subvención de la Diputación Provincial de Huesca.

Desde Arico recordaron que Angüés, a 24 kilómetros de la capital, era un pueblo con poco más de 800 habitantes en 1930, con una economía basada en la agricultura y en menor medida en la ganadería. Tras el golpe de estado de julio de 1936, se concentraron en Angüés dotaciones de varios puestos de la Guardia Civil, que se replegaron a Huesca ante la presión ejercida por las milicias organizadas en Barbastro.

«En esa columna marcharon 80 vecinos de derechas y otros 23 vecinos anarquistas de Angüés, detenidos por la Guardia Civil e ingresados en prisión. En total, en la semana que Angüés estuvo en manos de los sublevados, fueron enviados a la Prisión Provincial de Huesca un total de 31 angüesinos, todos asesinados en los meses siguientes», añadió Arico.