La Guardia Civil investiga el supuesto secuestro de una joven de 17 años y de su bebé, después de que las autoridades francesas alertaran a las españolas de este presunto rapto y de que los responsables del mismo estaban de camino a Aragón. En la petición de colaboración les informaban que iban en un determinado turismo con matrícula nacional.

Inmediatamente, el instituto armado activó un dispositivo especial para tratar de localizar y detener a los captores que dio resultado positivo a las 21.30 horas de ayer. Fue en la A-2, en el término municipal de La Muela (Zaragoza), en el que los agentes de la Guardia Civil de Tráfico dieron el alto al turismo, que en ningún momento trató de fugarse.

En el interior del coche iba a una joven de 17 años, su bebé y otros dos hombres. Todos ellos de origen del Este y con residencia en Épila. Según fuentes consultadas por este diario, los ocupantes rechazaron los hechos denunciados en Francia. Uno de los jóvenes apuntó que la chica de 17 años era su pareja sentimental y que el bebé era suyo. Una afirmación que la menor no rechazó y que incluso completó asegurando que se fue voluntariamente con él. Una circunstancia que hizo que los agentes intervinientes no detuvieran a los dos hombres que iban en el interior del vehículo, aunque sí fueron identificados mientras se aclaran los hechos denunciados.

COLABORACIÓN/ Es por ello que la Benemérita ha iniciado los trámites para que las autoridades francesas emitan una orden europea de detención. La joven, al ser mayor de 16 años, ha cumplido la edad de consentimiento sexual, por lo que, si ella asegura que no ha sido presionada y que es su novio, podría quedar sin efecto dicha denuncia. En el caso del bebé será necesario realizar las pertinentes pruebas de ADN para confirmar quiénes son sus padres.

La Fiscalía de Menores también sido informada sobre estos hechos de cara a que fuera necesario iniciar trámites para proteger a las menores. La investigación la realiza la Policía Judicial de la Guardia Civil.