Cuatro contenedores ardieron ayer, de madrugada, en la calle San Antón, del barrio zaragozano de Santa Isabel aunque el fuego, originado a las 4.30 horas, también causó otros daños materiales. Así, un vehículo que se encontraba estacionado cerca de los depósitos, resultó afectado por las llamas perdiendo los dos pilotos. Además, la fachada de una vivienda, una persiana y diversos cristales también sufrieron daños.

Los bomberos tardaron alrededor de media hora en sofocar las llamas y no hubo que lamentar daños personales.

Ese acto, supuestamente vandálico, se une a los que suelen darse cada fin de semana en la capital aragonesa. De hecho, hace una semana también ardió un contenedor en el barrio Oliver, apenas dos noches después de que el incendio de otros tres depósitos afectase a cuatro coches y obligase a desalojar a algunos vecinos de madrugada en la calle Monasterio de Piedra. En esa ocasión, el depósito ardió en la calle Reina Petronila, poco después de la medianoche, y la rápida intervención de los Bomberos de Zaragoza impidió que las llamas causaran otros daños.