Un individuo armado con una pistola perpetró un atraco en la mañana de ayer en la estación de cercanías de Goya, en Zaragoza, y huyó con un botín de 18.000 euros. El hecho se produjo sobre las 8.30 horas, cuando el atracador, que iba con la cara descubierta, irrumpió delante de las ventanillas de venta de billetes y exigió la entrega del dinero que hubiera en ese momento.

Los empleados de la estación llamaron a la Policía tan pronto como desapareció el asaltante e inmediatamente se personó en el lugar de los hechos el Grupo de Atracos. La venta de billetes se interrumpió por este motivo durante varias horas.

Fuentes de Renfe confirmaron que se había producido un atraco y señalaron que los empleados entregaron al delincuente todo el dinero que había en ese momento en las cajas.

«Pasó a primera hora de la mañana», señaló un portavoz de Renfe que dijo que no podía precisar la cantidad sustraída y que también desconocía qué arma llevaba el sospechoso, si bien aseguró que iba armado.

El hecho de que el botín fuera tan elevado pudo deberse al hecho de que, al ser el primer día del mes, numerosos usuarios habían acudido a renovar sus abonos temporales.

Fuentes del Cuerpo Nacional de Policía en Zaragoza confirmaron que había habido un atraco, pero sin precisar el lugar exacto. Solo manifestaron que se investigaba un robo «en la zona de Goya».

Los atracos constituyen una modalidad delictiva que ha experimentado un acusado declive en los últimos años. Una de las últimas grandes operaciones policiales en este sentido se desarrolló el pasado mes de enero, cuando fue detenido en Zaragoza un individuo como presunto autor de una ola de atracos en salones de juego y tiendas de frutos secos.

GRANDES CUCHILLOS / Estos últimos establecimientos constituyen los blancos favoritos de los atracadores a raíz del endurecimiento de las medidas de seguridad en las entidades bancarias, que disponen de cajas fuertes de apertura retardada.

En el mes de abril tuvo lugar otro hecho curioso cuando un joven de 18 años entró a robar en un salón de juegos de Zaragoza y a renglón seguido sufrió él mismo otro atraco por parte de un compañero con el que se vio tras el hecho delictivo en la calle Manifestación. El botín ascendía a 1.400 euros.

También el pasado mes de abril, la Policía detuvo en Zaragoza a dos hombres a los que se atribuía un total de nueve robos en establecimientos de juegos y de apuestas. Estos sospechosos blandían cuchillos de grandes dimensiones para asustar a los empleados y obligarles a entregar el dinero recaudado hasta el momento. Estas detenciones sucesivas rebajaron considerablemente la tensión provocada por los atracadores en las salas de juego, un sector muy castigado por este tipo de delincuencia.