Los presidentes de las comarcas de La Jacetania y Alto Gállego, Alfredo Terrén y Mariano Fañanás, respectivamente, se reunirá esta semana para tratar el caso del cierre del matadero municipal de Jaca y la posible construcción de una instalación supracomarcal. La idea es que en el encuentro participen también los alcaldes de Sabiñánigo y la localidad jaquesa, Carlos Iglesias y Enrique Villarroya, al estar en estos núcleos las dos instalaciones cárnicas del territorio.

El tema central será analizar las conclusiones a las que llegaba el estudio de viabilidad de un posible matadero supracomarcal. El problema radica en que una instalación que diera servicio a ambos territorios sólo sería viable si, además de contar con una sala de despiece y en la que se haga una transformación completa del ciclo, se incremente notablemente el número de sacrificios que se efectúan en las dos comarcas. Una cifra que en 2001 fue de 530 toneladas.

Entre las opciones que se plantean para intentar llevar adelante la creación de una instalación supramunicipal se apunta la de implicar a la iniciativa privada, ya que así se podría financiar el centro con fondos Proder de la Unión Europea.

El pasado viernes, el ayuntamiento jaqués no había recibido el acta de la resolución del cierre preventivo que Sanidad decretó el 10 de mayo. Un documento que recogerá los motivos de la clausura y que abrirá un plazo de 10 días para que el consistorio presente alegaciones.

De momento, son los carniceros y ganaderos los que buscan la manera de garantizar el abastecimiento de carne a las carnicerías jaquesas. Eso sí, con la intuición de que "el matadero no va a volver a abrirse", según dicen en este colectivo. La primera opción que se plantearon los ganaderos y carniceros fue la de adquirir o alquilar un camión para reunir las reses y sacrificarlas en Huesca.

MAS GASTOS Esta idea se planteó ante la imposibilidad de que el matadero de Sabiñánigo, catalogado como anexo II; es decir, de carácter local, no puede hacerse cargo de las reses procedentes de La Jacetania. Sin embargo, la opción de sacrificar en la capital oscense por cuenta propia supondría incrementar los gastos, sobre todo, los referentes a costos de transporte.

Por ello, los carniceros jaqueses analizan otras soluciones como que sea la Cooperativa de Carniceros de Huesca la que se haga cargo del sacrificio y posterior distribución. Existe una tercera opción, que implicaría que los pequeños y medianos ganaderos que ahora suministran a los establecimientos de Jaca tuvieran que buscar nuevos clientes, ya que las carnicerías jaquesas pasarían a abastecerse directamente de la Cooperativa Oviaragón.