El Salud ha acometido, por fin, la incorporación de profesionales para atacar la demora existente en el servicio de anatomía patológica del hospital Miguel Servet de Zaragoza, que acumula un desfase inédito de alrededor de tres meses provocada por la falta de personal. Fuentes del propio centro hospitalario, que mostraron su confianza en que las últimas decisiones adoptadas desde el Salud contribuyan decisivamente a paliar esta tardanza, advirtieron de que esa demora de tres meses alcanza a analíticas concernientes a los servicios de Digestivo y de Ginecología.

En ese sentido, hace apenas un par de semanas se incorporaron dos nuevos patólogos, a los que, además, se sumaron más técnicos de laboratorio. El movimiento de la Administración responde a las necesidades del servicio en el sector II y que vienen siendo expuestas desde hace meses por el doctor Ramiro Álvarez, jefe de servicio de Anatomía Patológica del sector.

La demora de tres meses afecta, principalmente, a casos no urgentes. Así se asegura desde el Salud, donde advierten que los posibles casos de cáncer gozan de absoluta preferencia. "Toda sospecha neoplásica se considera urgente y está exenta de estos tres meses de demora ya que se hace en uno o dos días. Lo preferente se lleva a cabo en una semana y lo que se va a hacer es trabajar en reducir esos tres meses para casos que no revisten de estas características", indicaron desde el Salud.

Los problemas de personal en Anatomía Patológica del sector se acumulan desde hace meses, aunque la demora ha registrado un importante incremento en las últimas semanas en especialidades como Digestivo. Pero hay más. El análisis en Anatomía Patológica de las citologías, por ejemplo, lleva tiempo con una demora acumulada de tres meses. Ya en febrero, la espera alcanzaba el mes y medio en pruebas no urgentes.

La tardanza no es habitual en una unidad de esta importancia y los servicios de Atención al Paciente ya han recogido reclamaciones y quejas de usuarios. Desde el servicio se apela a la relevancia de dos puestos vacantes por jubilación que estaban pendientes de ser cubiertos, algo que ya se habría producido. "El origen de esta situación, excepcional, se debe a la conjunción de varios factores o circunstancias en el tiempo, como esos puestos sin cubrir, a lo que se une la sobrecarga de trabajo desencadenada por el Plan Impulso, puesto en marcha en el último trimestre del año pasado para reducir listas de espera quirúrgica, lo que incrementó notablemente la entrada de biopsias en nuestro servicio", explicó entonces.

Ahora, la puesta en marcha del plan de choque integral por parte del Salud vuelve a amenazar a un servicio que volverá a disponer de una gran demanda.