Los concejales del Ayuntamiento de Zaragoza llegaron a la comisión de Hacienda de este lunes con resaca, pero de números, de sumas y restas y de proyectos que aparecen y desaparecen del presupuesto del 2021. Las negociaciones se extendieron hasta la noche y pasadas las 00.00 todavía se estaban mensajeando varios de ellos. Cada uno para hablar de su libro o, en este caso, de su enmienda.

Tras un fin de semana frenético, la titular de Hacienda, María Navarro, pasó buena parte del domingo en la casa consistorial cuadrando las partidas, quitando de aquí y allá para poder satisfacer las demandas de Vox. El balance es que la ultraderecha ha sacado adelante 43 de las 66 enmiendas presentadas.

La cooperación al desarrollo no fue el principal escollo de su negociación. Al revés, Vox quería que el presupuesto incluyese proyectos muy concretos, sus proyectos, y que tuvieran una consignación económica en condiciones para evitar así que se conviertan en meros títulos sin visos de ser ejecutados. El intercambio de cromos entre PP y Vox, con Cs como actor secundario, no hace más que dar alas a una ultraderecha crecida tras las elecciones catalanas que busca votos entre las rentas más bajas y a costa de los más vulnerables. Ya lo dijo el portavoz de Vox, Julio Calvo, gran parte de sus votantes son población empobrecida. Por eso exigía actuaciones de regeneración en los barrios consolidados y obreros (500.000 euros más); prolongar la calle Sergio López Saz, en Oliver, que tendrá 200.000 euros este año; y la adecuación del camino Valdeconsejo, con otros 150.000.

Fuentes cercanas a la negociación aseguran que no estaban dispuestos a que sus programas no apareciesen en las cuentas. Querían dinero para la zona franca, que rasca 95.000 euros que se detraen del plan de comercio local, o para la ventanilla única, que también le quita dinero a este programa. Otros 50.000.

Otros programas que se quedan a cero

Tras la aprobación de las enmiendas de Vox, las entidades vecinales se quedan temblando, sin apenas financiación. En cambio, gana el plan de ayudas urgentes que quiere impulsar Vox y que dispondrá de 400.000 euros. También sale perjudicado el programa Zaragalla, que cede 150.000 euros al plan de choque de ayudas de urgencia. Los polígonos urbanos suman a los 35.000 euros previstos en el proyectos otros 200.000 euros más, en detrimento de Giesa.

Vox también tenía claro que quería cargarse otros proyectos y como el equipo de PP-Cs no pareció dispuesto buscó a los partidos de izquierdas bien entrada la noche. Recurrió a PSOE, Podemos y ZeC para quitarle los 200.000 euros previstos para la supermanzana de la plaza San Francisco y para destinar la cuantía de la reforma del entorno de la iglesia Santiago el Mayor a las zonas más degradadas del barrio. No fue difícil reunir su apoyo porque varias de sus enmiendas coincidían, como minorar los fondos para la rehabilitación de la Casa de Palafox, que pierde 450.000 euros de los 500.000 previstos y que está vinculada al Espacio Goya. La partida para promoción de la figura del pintor, 50.000 euros, también desaparecen.

Las malas lenguas decían en el ayuntamiento que Cs ha sido la formación que peor parada ha salido de la negociación con Vox, mientras que el PP ha logrado mantener sus principales proyectos.