Los trabajadores de Pikolín dieron ayer el visto bueno al preacuerdo alcanzado por la empresa y el comité para sellar un nuevo convenio colectivo. En concreto, la plantilla apoyó de forma mayoritaria (con un 78,5% de los votos) el documento, que entre otras cuestiones plantea un nuevo pacto laboral de cuatro años con incrementos salariales que oscilan desde el 1,2% del 2019 hasta el 1,6% del 2022, según informó el comité de empresa. Dicho de otra forma, en los cuatro años de vigencia del convenio los empleados verán crecer sus nóminas en 1.500 euros.

Además del incremento del salario, aumentan todos los pluses establecidos en el convenio con el IPC real del año anterior y se establece una paga de beneficios del 0,75% bruto sobre el Ebit (beneficio antes de impuestos).

En la votación de ayer participaron un total de 565 trabajadores, de los que 445 (el 78,5%) respaldaron el preacuerdo, mientras que 111 (19,5%) votaron en contra) y hubo 11 votos en blando (el 2%). La plantilla está integrada por un total de 686 trabajadores.

El comité de empresa, integrado por OSTA, CCOO y UGT se mostró ayer satisfecho por el resultado de la votación y agradeció el respaldo de la plantilla tras varias semanas de 10 meses de negociaciones. «Estamos muy contentos», manifestó su presidente, Pedro Lobera, que cree que el convenio permitirá tener «estabilidad» y hacer frente al ciclo de desaceleración que se avecina, según vaticinan los expertos.

Uno de los aspectos que resaltó del convenio es haber podido sacar del convenio colectivo la distribución irregular de la jornada, un asunto que se había convertido en uno de los principales puntos de fricción durante la negociación con la dirección.